Con 114 votos afirmativos, la Asamblea Nacional del Ecuador aprobó el 6 de mayo de 2025 la Ley Orgánica de Regulación Contra la Competencia Desleal y para Proteger la Libre Competencia. Esta iniciativa pretende ordenar el mercado ecuatoriano y garantizar la equidad entre actores económicos. También protege especialmente a los pequeños emprendimientos y negocios locales frente a prácticas abusivas.
El texto normativo, que fue aprobado tras meses de análisis y revisión, ha sido calificado por sus impulsores como una herramienta fundamental. Busca estimular la inversión, generar confianza en el entorno empresarial y consolidar un modelo de desarrollo más justo y equilibrado.
Un marco legal que impulsa la inversión y la seguridad jurídica
Durante el debate, el legislador Jorge Acaiturri, ponente del informe, destacó que esta ley constituye un avance estructural para el país. En su intervención, aseguró que el objetivo es claro: establecer reglas de juego justas que garanticen un mercado competitivo y transparente.
“Las reglas claras generan confianza, y la confianza atrae inversión. Esta ley busca precisamente eso: brindar seguridad a los actores económicos, especialmente a los más pequeños”, afirmó Acaiturri.
El legislador también subrayó que la nueva ley se inspira en marcos regulatorios de países como Estados Unidos y miembros de la Unión Europea. En esos lugares, se diferencia claramente entre la promoción de la competencia y la regulación de prácticas comerciales desleales.
Protección para los pequeños negocios y el emprendimiento
El debate parlamentario evidenció la preocupación de varios legisladores por los desequilibrios existentes en el mercado. El asambleísta Blasco Luna recordó que la propuesta original fue presentada en 2022 por el entonces Defensor del Pueblo, César Córdova. Fue tramitada por la comisión con imparcialidad.
Como ejemplo, Luna mencionó el caso de la provincia de Cañar. En ese lugar, grandes cadenas comerciales han desplazado a los pequeños negocios locales, afectando directamente la economía familiar.
“Esta ley permitirá transparentar las condiciones del mercado y proteger al emprendedor frente a monopolios que han afectado la economía local”, aseguró Luna.
Por su parte, el asambleísta Arturo Ugsha calificó la ley como un instrumento clave para detener prácticas abusivas. En sus palabras, se trata de una herramienta que da a los negocios formales y emprendedores un terreno de competencia más justo y equilibrado.
Críticas técnicas y preocupaciones jurídicas
A pesar del respaldo mayoritario, el proyecto no ha estado exento de críticas. Varios expertos del ámbito jurídico y económico han advertido sobre posibles ambigüedades y riesgos regulatorios en la implementación de la ley.
Una de las principales preocupaciones es la confusión entre la defensa de la competencia y la regulación de prácticas desleales. Según analistas, esto podría derivar en interpretaciones poco claras y sanciones desproporcionadas.
También se ha señalado que el texto podría generar una superposición de competencias entre la justicia civil y la Superintendencia de Control del Poder de Mercado. Esto complicaría la resolución efectiva de los conflictos y aumentaría la incertidumbre jurídica para las empresas.
Hacia un entorno económico más equilibrado
A pesar de las críticas, la aprobación de esta normativa representa un paso importante para fortalecer el ecosistema empresarial ecuatoriano. La Ley Orgánica de Regulación Contra la Competencia Desleal busca ser un punto de partida hacia un sistema más justo. No solo debe beneficiar a grandes actores económicos, sino que también debe proteger y estimular a los emprendedores, negocios locales y consumidores.
Resta ahora observar cómo se implementará esta ley. También es importante ver qué reglamentos secundarios se emitirán y cómo se resolverán las tensiones técnicas advertidas por los analistas. Lo que está claro es que el país ha optado por un marco legal que apuesta por la equidad y el respeto a las reglas del mercado.
Fuente: El Diario
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