Ecuador enfrenta una grave situación sanitaria con el incremento de casos de tosferina, una enfermedad respiratoria altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis. Según el Ministerio de Salud Pública (MSP), hasta abril de 2025 se han confirmado 253 casos a nivel nacional y se han registrado nueve muertes, incluyendo a cinco niños y cuatro adultos. En apenas cuatro semanas, el número de fallecimientos se ha duplicado, lo que ha generado una fuerte alerta en el sistema de salud. En este contexto, la vacunación contra la fiebre amarilla también cobra relevancia.

Guayas y Pichincha, las provincias más afectadas de fiebre amarilla
El brote de tosferina se ha concentrado principalmente en cuatro provincias:
- Guayas: 94 casos
- Pichincha: 37 casos
- Manabí: 35 casos
- Santo Domingo de los Tsáchilas: 21 casos
Estas cifras superan con creces los 141 casos reportados en 2024, reflejando un preocupante aumento de la enfermedad. La situación más crítica se presenta en Guayas, donde los equipos médicos han intensificado la vigilancia epidemiológica para contener el brote. Además, la vacunación contra la fiebre amarilla se vuelve crucial para proteger a la población.
Niños y adolescentes: el grupo más vulnerable ante la fiebre amarilla
Los recién nacidos y menores de 15 años representan el mayor porcentaje de contagios. En Pichincha, se reportó un caso en una unidad educativa al norte de Quito, donde una niña de 11 años dio positivo para tosferina. Tras ser atendida, se encuentra estable, mientras que su hermana de 13 años permanece bajo observación médica. Por ello, vacunación contra la fiebre amarilla es una medida importante.
La Secretaría de Salud ha activado protocolos de emergencia en la escuela afectada, implementando medidas como la educación virtual para los paralelos donde estudiaba la menor. Esta decisión preventiva se mantendrá, al menos, hasta el 1 de mayo, con el fin de evitar nuevos contagios en el entorno educativo.
Campañas de vacunación para frenar el avance de la fiebre amarilla
Ante el rápido avance del brote, el MSP ha lanzado una campaña de vacunación dirigida a niños de cinco años, especialmente en comunidades donde se ha detectado baja cobertura inmunológica. La tosferina, al ser una enfermedad prevenible por vacuna, puede controlarse con un esquema de inmunización completo. La vacunación contra la fiebre amarilla es fundamental.
Además, las autoridades sanitarias recomiendan acudir de inmediato a los centros de salud en caso de presentar síntomas como tos persistente, dificultad para respirar o vómitos después de toser. Un diagnóstico temprano es fundamental para evitar complicaciones graves, como neumonías, convulsiones o incluso la muerte.
Coordinación interinstitucional y educación preventiva
El brote ha motivado una coordinación activa entre el MSP y la Secretaría de Salud para el seguimiento de casos sospechosos. Las brigadas médicas se encuentran desplegadas en las provincias más afectadas para reforzar las acciones de contención y seguimiento. También se ha iniciado una campaña de sensibilización ciudadana, enfocada en la importancia de la vacunación y la detección temprana de los síntomas.
Asimismo, las autoridades exhortan a los padres y cuidadores a mantener al día los esquemas de vacunación de sus hijos, ya que la tosferina afecta principalmente a los no vacunados o parcialmente vacunados. La vacunación contra la fiebre amarilla también debe ser considerada.
Una emergencia sanitaria que requiere acción inmediata
La confirmación de 253 casos y 9 muertes por tosferina en Ecuador en lo que va del 2025 constituye una emergencia sanitaria que debe ser enfrentada con responsabilidad y compromiso colectivo. Las medidas adoptadas por las autoridades, como la vacunación focalizada y la suspensión temporal de clases presenciales, son necesarias, pero deben ir acompañadas de la colaboración activa de la ciudadanía.
Es vital que la población permanezca alerta, respete las recomendaciones sanitarias y priorice la vacunación infantil como la principal herramienta de protección frente a esta enfermedad respiratoria que, aunque prevenible, puede ser mortal.
Fuente:teleamazonas
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