La Vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad, actualmente embajadora en Israel, ha expresado su disposición para reestablecer el diálogo con México. Este llamado surge luego de que las relaciones diplomáticas entre ambos países se deterioraran tras el asalto a la embajada mexicana en Quito, ordenado por el presidente Daniel Noboa. En dicho incidente, las autoridades ecuatorianas ingresaron a la embajada para detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa. Este suceso ha generado una serie de tensiones diplomáticas que Abad considera crucial resolver.
La Constitución de Ecuador establece que, en caso de ausencia temporal del jefe de Estado, el vicepresidente debe asumir sus funciones. Por ello, Abad podría tomar las riendas del país si Noboa decide presentarse como candidato a la reelección. Este contexto añade una dimensión adicional a sus declaraciones sobre la necesidad de diálogo.
Las declaraciones de la Vicepresidenta sobre el incidente en la embajada
Verónica Abad calificó el asalto a la embajada mexicana como “inconcebible”, subrayando que se trató de una violación al derecho internacional que protege la propiedad diplomática de otro país. La Vicepresidenta expresó que este incidente dificultó mantener una relación diplomática con el embajador de México en Israel.
“Es una vergüenza que Ecuador haya resuelto sus problemas de esta manera”, enfatizó Abad. Ella considera que es esencial iniciar un diálogo serio entre los dos gobiernos para resolver la situación. Además, mencionó que, en caso de asumir la presidencia temporalmente, analizará toda la información disponible para propiciar un acercamiento con México.
La importancia de la Vicepresidenta en el contexto político actual
El distanciamiento entre Abad y Noboa, que es evidente desde la campaña para la segunda vuelta electoral, no ha impedido que la Vicepresidenta se muestre proactiva en abordar temas de importancia nacional e internacional. Abad afirmó que, si llega a asumir las funciones de jefa de Estado interina, buscará abrir una puerta para solucionar la situación diplomática con México. “Correcto”, respondió al ser consultada sobre esta posibilidad.
El 5 de abril pasado, el presidente Noboa ordenó el ingreso de la Policía a la embajada mexicana en Quito para detener a Jorge Glas. Glas, quien había recibido asilo diplomático del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, tenía una orden de detención en su contra por un caso de corrupción. Desde su última detención, Glas se encuentra recluido en La Roca, la prisión de máxima seguridad de Ecuador.
Retos y oportunidades para el futuro de las relaciones diplomáticas
La detención de Jorge Glas, uno de los hombres fuertes del gobierno de Rafael Correa, ha sido un punto de controversia. Glas rechaza los cargos en su contra, declarándose un perseguido político. Actualmente, cumple una pena de ocho años de cárcel por dos sentencias por corrupción dictadas en 2017 y 2020. Además, este contexto político complejo plantea desafíos significativos para cualquier intento de reestablecer las relaciones diplomáticas entre Ecuador y México.
La Vicepresidenta Abad enfatiza la necesidad de acciones concretas para mejorar la situación. “Las acciones de visitarnos, pedirles que nos visiten o abrir un intermedio son necesarias”, comentó. Abad cree firmemente en la importancia de restablecer una relación diplomática funcional y respetuosa, lo que podría traer beneficios mutuos para ambos países.
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