El fenómeno de la “renuncia silenciosa” ha dado un giro en el 2024, según el estudio Renuncia Silenciosa de Multitrabajos. En Ecuador, el 76% de las personas trabajadoras afirma estar completamente comprometido con su labor, una mejora significativa respecto al 57% registrado en 2023. Este aumento de 19 puntos porcentuales refleja una disposición positiva hacia el empleo, lo que parece indicar que más talentos se entregan plenamente a su labor.
Incremento del compromiso laboral
El compromiso de los talentos ha mejorado sustancialmente. Según el estudio, el 76% de los trabajadores ahora se dedica plenamente a sus responsabilidades, un claro contraste con el 36% que, en 2023, solo cumplía con lo mínimo necesario. Este incremento del compromiso ha generado optimismo entre los empleados, quienes parecen encontrar nuevas motivaciones para cumplir con sus labores diarias. Sin embargo, el 20% de los trabajadores aún se limita a lo mínimo indispensable, lo que sugiere que la renuncia silenciosa no ha sido completamente erradicada.
Perspectiva de los especialistas en Recursos Humanos
A pesar de esta mejora, los especialistas en Recursos Humanos tienen una visión más crítica. El 80% de las organizaciones todavía enfrenta problemas relacionados con la renuncia silenciosa. De acuerdo con estos expertos, este fenómeno persiste en gran medida debido a salarios y beneficios insuficientes, lo que impacta directamente en el compromiso de los empleados. Según el estudio, el 29% de los especialistas atribuye la renuncia silenciosa a estas deficiencias económicas, mientras que otro 18% lo asocia con la falta de compromiso y el desinterés personal.
Causas subyacentes según los talentos
Por otro lado, los talentos que experimentan la renuncia silenciosa destacan que su malestar no siempre está relacionado con el salario. Un significativo 38% de los trabajadores atribuye su falta de motivación a la carencia de reconocimiento y valoración por parte de sus empleadores. Además, el 15% menciona trabajar en un ambiente tóxico, lo que afecta negativamente su bienestar, mientras que el 13% señala que la falta de motivación es un factor clave en su disminución de esfuerzo laboral.
Políticas para revertir la renuncia silenciosa
Ante esta problemática, los departamentos de Recursos Humanos en Ecuador han implementado diversas estrategias para combatir la renuncia silenciosa. El 35% de los expertos opta por redistribuir las tareas, asegurando una carga laboral justa y desafiante. Además, un 24% toma acciones correctivas en situaciones graves, que incluyen desde reuniones formales hasta medidas disciplinarias. Por otro lado, el 12% de las empresas ha comenzado a realizar encuestas de satisfacción para identificar problemas específicos que afectan la motivación de los empleados.
Motivación y metas de los trabajadores
A pesar de las dificultades, un 73% de los empleados en Ecuador tiene una percepción positiva de su empleo, mostrando un compromiso considerable. Este porcentaje ha crecido en 10 puntos porcentuales con respecto al año anterior, lo que indica un cambio favorable en la actitud de los trabajadores. Entre las motivaciones principales, el 63% de los empleados busca aprender y progresar en su empleo actual, mientras que otros apuntan a ascender o incrementar sus ingresos. No obstante, todavía existe un 27% de personas que no se siente comprometida, lo que pone de manifiesto que queda trabajo por hacer.
Actitud hacia las tareas adicionales
Cuando se les presenta un proyecto fuera de sus responsabilidades habituales, el 63% de los trabajadores está dispuesto a participar inmediatamente, lo que refleja un alto grado de compromiso con la empresa. Solo el 6% se rehúsa a colaborar en tareas que no forman parte de su rol habitual. Esta disposición a asumir nuevas responsabilidades destaca el hecho de que, aunque persiste la renuncia silenciosa, muchos talentos aún se entregan plenamente a su labor.
Un fenómeno en declive
Si bien los desafíos de la renuncia silenciosa no han desaparecido por completo, el 2024 muestra un panorama más alentador. Cada vez más talentos se entregan plenamente a su labor, y las organizaciones están tomando medidas para abordar las causas subyacentes de la desmotivación. Este fenómeno, aunque aún presente, parece estar en declive, y con la implementación de políticas adecuadas, podría seguir reduciéndose en el futuro cercano.
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