A partir del día de ayer, la Santísima Iglesia Católica cuenta con un nuevo miembro en su Santoral, se trata de Jorgito Glas Espinel, el Santo de la Refinería de Esmeraldas, el Padrino del nuevo Santo de la Iglesia Universal Socialista Progresista Revolucionaria es el Papa Brasilero Lula da Silva Primero, quien con su venia acaba de posesionar al tristemente célebre patrón de la reconstrucción de Manabí después del terremoto que la afecto y, compañero de las aventuras juveniles con su mentor y camarada Boy Scout, Rafael Vicente Primero, actualmente prófugo de la Justicia tercermundista ecuatoriana.
Es completamente inexplicable que el Gobierno Nacional dirigido por un santurrón perteneciente al OPUS DEI, el Canciller de la República, el Embajador en Brasilia y el presidente de la Corte Nacional de Justicia, todavía no se dan por enterados y presenten sus enérgicas protestas en contra de las Autoridades de Brasil.
Justificaciones de lado y lado seguramente pronto saldrán a la luz pública, pero sí existen razones valederas que ya es tiempo que todo el país las conozca de la fuente directa sin dilatar más el tiempo y someterse gradualmente al escarnio nacional.
Fuente: la nación
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