Visita al CECOT: una inspección directa del modelo carcelario salvadoreño
El 30 de abril de 2025, el Ministerio de Defensa de Ecuador informó sobre la visita oficial de su Bloque de Seguridad al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), ubicado en El Salvador. Esta delegación, integrada por los ministros Gian Carlo Loffredo (Defensa) y John Reimberg (Interior), recorrió las instalaciones que representan el modelo carcelario salvadoreño, actualmente considerado uno de los más estrictos del continente.
Durante la visita, los funcionarios ecuatorianos constataron la infraestructura fortificada, los controles militares mixtos y la gestión penitenciaria estricta, características que destacan del enfoque del gobierno de Nayib Bukele. Este modelo, aunque altamente cuestionado por organismos internacionales, ha sido presentado como un paradigma de eficiencia y orden.
Características del modelo carcelario salvadoreño
El modelo carcelario salvadoreño se implementa en el CECOT, una megacárcel con capacidad para 40,000 reclusos, aunque el gobierno salvadoreño proyecta duplicarla. Entre sus atributos más notables se encuentran:
- Aislamiento geográfico estratégico, lejos de zonas urbanas.
- Muros de 11 metros, torres de vigilancia, y cercas electrificadas de 15,000 voltios.
- Sistema de videovigilancia 24/7 y control centralizado de servicios.
- Incomunicación total de los internos con el exterior.
- Prohibición de visitas y programas de rehabilitación.
El modelo se orienta hacia el castigo ejemplarizante, más que a la reinserción. Esto ha generado numerosas críticas por violaciones a los derechos humanos, incluida la denuncia de 368 muertes bajo custodia, según reportes de organizaciones como Cristosal y Amnistía Internacional.
¿Qué busca Ecuador al observar este modelo?
Frente a su crisis penitenciaria, Ecuador estudia adaptar el modelo carcelario salvadoreño. En enero de 2024, el presidente Daniel Noboa anunció la construcción de dos cárceles de máxima seguridad. La más avanzada, la Cárcel del Encuentro, se erigirá en la costa ecuatoriana. Aunque inspirada en el CECOT, incluirá una clasificación por peligrosidad, algo ausente en el modelo original.
Según el Ministerio de Defensa, la visita permitió identificar elementos clave en seguridad física, arquitectura penitenciaria, tecnología de control y disciplina interna. Estas lecciones servirán para reconfigurar el sistema carcelario nacional, actualmente desbordado por la violencia, el narcotráfico y la corrupción institucional.
Críticas y desafíos del modelo carcelario salvadoreño
El modelo carcelario salvadoreño ha reducido drásticamente los homicidios, pero su coste en derechos fundamentales es objeto de preocupación global. Organizaciones de derechos humanos han denunciado:
- Hacinamiento extremo: 0.6 m² por recluso, lejos del estándar mínimo.
- Torturas y tratos inhumanos.
- Muertes no esclarecidas, muchas sin autopsia.
Estos elementos representan riesgos jurídicos y éticos si Ecuador decide seguir este camino sin establecer mecanismos de control y supervisión externa.
¿Modelo a seguir o advertencia?
La visita al CECOT marca un punto de inflexión. Ecuador explora cómo adaptar el modelo carcelario salvadoreño, pero deberá equilibrar eficiencia penitenciaria con respeto a los derechos humanos. Si bien el enfoque de Bukele muestra resultados inmediatos en seguridad, su sostenibilidad y legitimidad a largo plazo siguen en debate.
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