El Ministerio de Energía y Minas, liderado por la ministra Andrea Arrobo Peña, ha presentado un ambicioso plan de acción para abordar la emergencia eléctrica en Ecuador, luego de que el proceso de contratación de 465 MV fuera declarado desierto. La propuesta busca garantizar un suministro eléctrico eficiente, económico y confiable, haciendo énfasis en la transición energética.
Actualmente, se prioriza la promoción de inversiones públicas y privadas en la industria eléctrica, como parte de la transición energética, con miras a obtener resultados a mediano y largo plazo. Se han iniciado procesos de contratación para generar capacidad adicional y satisfacer la demanda eléctrica, especialmente durante el período de estiaje 2024-2025. Además, se gestionan recursos para cubrir el déficit presupuestario generado por los altos costos de generación en 2023, con un enfoque en la cooperación con entidades multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial.
El gobierno también se acerca a industriales y grandes comercios para fomentar la colaboración en la autoabastecimiento de energía eléctrica, aliviando así la presión sobre el sistema eléctrico. Estas acciones se complementan con el desarrollo de proyectos de generación dentro del Plan Maestro de Electricidad (PME), reformas a la Ley Orgánica del Servicio Público de Energía Eléctrica, el fortalecimiento de las redes de distribución y proyectos de alumbrado público con tecnología LED, priorizando zonas rurales y urbanas marginales.
La ministra Arrobo ha establecido estrategias conjuntas con los ministros de Economía y Ambiente, Juan Carlos Vega (designado) y Sade Fritschi, respectivamente, marcando un compromiso decidido para afrontar la crisis del sector eléctrico del país.