Lucía Jaramillo, asambleísta de ADN, ha anunciado su intención de presentar una denuncia por violencia política contra Aquiles Álvarez, alcalde de Guayaquil. Debido a que éste la calificara públicamente con términos denigrantes. Álvarez se refirió a Jaramillo como una “niña vaga” y una “vocera turra” en respuesta a las acusaciones de contrabando de combustibles formuladas por el Frente Parlamentario de Lucha contra el Tráfico de Combustible.
Declaraciones y confrontación
“Recibí insultos denigrantes provenientes de un cavernícola que gobierna mi ciudad”, expresó Jaramillo en una declaración pública. Con el fin de la critica a la falta de respeto y altura en las palabras de Álvarez. Afirmó estar preparada para enfrentar este tipo de ataques en su carrera política y personal: “Aquiles, no te tengo miedo; yo tengo los ovarios bien puestos. Nos vemos en la Fiscalía”.
Acusaciones de contrabando de combustibles
La polémica surge a raíz de las acusaciones formuladas por Jaramillo respecto a un presunto esquema de contrabando de combustibles, donde estarían involucrados Álvarez, dos de sus hermanos y dos compañías del sector. Según Jaramillo, las empresas Fuelcorp S.A. y Copedesa Gasgrupo S.A., en las cuales los hermanos Álvarez tienen participación accionaria, están implicadas en actividades irregulares de venta y distribución de combustibles.
Creación del Frente Parlamentario
El Frente Parlamentario de Lucha contra el Tráfico de Combustible fue establecido como respuesta a estas acusaciones, basándose en discrepancias detectadas entre el volumen de combustible despachado por Petroecuador y el volumen facturado por diversas estaciones de servicio.
Respuesta de Álvarez
Álvarez ha desestimado las acusaciones en su contra como una “cortina de humo”, refiriéndose a Jaramillo y a su hermana Paola Jaramillo como personas que “pasaron vagando en el Municipio de Guayaquil” durante su afiliación al Partido Social Cristiano (PSC). Esta respuesta ha intensificado la confrontación pública entre ambos políticos.
Impacto político y judicial
La denuncia por violencia política presentada por Jaramillo ante el Tribunal Contencioso Electoral marca un nuevo capítulo en este enfrentamiento político. Se espera que el proceso legal aclare las acusaciones de ambos lados y determine las responsabilidades correspondientes. La opinión pública observa de cerca el desarrollo de este caso que podría tener implicaciones significativas para la política local en Guayaquil y más allá.
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