La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una recomendación urgente a Ecuador para que refuerce sus esquemas de vacunación contra la fiebre amarilla, particularmente en las localidades fronterizas con Colombia. Esta solicitud llega en medio de una preocupación creciente debido a los recientes brotes de la enfermedad en el país vecino, donde ya se han reportado 24 muertes por fiebre amarilla en lo que va del 2025. Ante este panorama, las autoridades sanitarias instan a tomar medidas preventivas para evitar que el mal se propague en la región.
Preocupación por la situación en Colombia
La OPS ha expresado su preocupación por la situación de la fiebre amarilla en Colombia, especialmente en los departamentos cercanos a Ecuador, como Nariño, Putumayo y Caquetá. Estos territorios, que comparten una extensa frontera con Ecuador, han sido los más afectados por el brote en 2025. Los casos de fiebre amarilla se concentran principalmente en áreas selváticas, lo que ha llevado a Colombia a declarar una emergencia sanitaria para controlar la expansión del virus.
Daniel Salas, gerente de inmunización de la OPS, comentó que, dada la efectividad de la vacuna contra la fiebre amarilla, lo más importante para proteger a la población ecuatoriana es revisar y reforzar los esquemas de vacunación en las zonas de riesgo. La OPS subraya la importancia de tomar medidas preventivas para proteger tanto a los residentes como a los viajeros que se dirigen a zonas de riesgo.
Situación en Ecuador y medidas preventivas
En Ecuador, el Ministerio de Salud Pública ha confirmado recientemente un caso aislado de fiebre amarilla en la provincia de Zamora Chinchipe, en el sur del país. Aunque las autoridades aseguran que se trata de un caso aislado, se mantiene una vigilancia activa, especialmente en las zonas fronterizas con Colombia. El Ministerio de Salud también ha solicitado que los viajeros que se dirigen a áreas endémicas, como la Amazonía o países con brotes activos, reciban una dosis de la vacuna contra la fiebre amarilla al menos 10 días antes de viajar.
A nivel nacional, la cobertura de vacunación contra la fiebre amarilla es superior al 95 % en niños de un año de edad, lo que garantiza que gran parte de la población esté protegida. La vacuna, que proporciona inmunidad de por vida, se administra de manera rutinaria en el país desde el año 2000 en la región amazónica y desde 2009 a nivel nacional.
Prevención y recomendaciones adicionales
Las autoridades ecuatorianas han instado a los habitantes de las comunidades cercanas a la frontera con Colombia a tomar medidas adicionales para prevenir la propagación de la fiebre amarilla. Entre estas medidas, se destaca la eliminación de criaderos de mosquitos, el uso de repelentes y la vigilancia de síntomas como fiebre, dolor de cabeza, náuseas y vómito. En caso de presentar estos síntomas, se recomienda acudir de inmediato a un centro de salud para recibir atención y descartar la fiebre amarilla u otras enfermedades transmitidas por vectores.
El Ministerio de Salud ha asegurado que existen suficientes dosis de la vacuna contra la fiebre amarilla para inmunizar a la población en riesgo, y ha reiterado la importancia de la prevención, especialmente en las zonas más vulnerables.
La fiebre amarilla sigue siendo una amenaza latente en la región, especialmente en las áreas cercanas a la frontera entre Ecuador y Colombia. Ante los recientes brotes en Colombia, las autoridades sanitarias de la OPS han instado a Ecuador a reforzar las estrategias de vacunación, particularmente en las localidades fronterizas, para evitar la propagación de la enfermedad. Con una vacuna altamente efectiva y medidas preventivas claras, el país tiene las herramientas necesarias para proteger a su población de esta peligrosa enfermedad.
Fuente: Ecuavisa
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