La guatita, uno de los platos más tradicionales y queridos de la gastronomía ecuatoriana, ha sido reconocida internacionalmente. Se considera uno de los 50 mejores platos de menudencias del mundo, según la guía gastronómica global TasteAtlas. Este reconocimiento no solo resalta la riqueza culinaria del país, sino que también pone en valor la historia y cultura que rodean a este emblemático plato.
Un plato con identidad ecuatoriana
La guatita es un estofado preparado a base de mondongo (estómago de res) cocido, bañado en una salsa espesa de maní. Está acompañado generalmente de arroz blanco, papas cocidas, huevo duro y ají criollo. Su sabor intenso, su textura cremosa y el equilibrio de condimentos le han dado un lugar especial en la memoria gustativa de los ecuatorianos.
En ciudades como Guayaquil, Quito y Cuenca, la guatita no solo es parte de los almuerzos familiares de domingo. También forma parte de los mercados populares, las fondas de barrio, e incluso de los estadios de fútbol. En estos lugares, suele ser consumida por los aficionados durante los partidos.
De la cocina popular al reconocimiento mundial
En el ranking publicado por TasteAtlas en mayo de 2025, la guatita obtuvo una calificación de 3,8 sobre 5. Ocupa el puesto 40 entre los mejores platos de menudencias del planeta. Si bien descendió algunos lugares respecto a su posición en 2023, cuando se encontraba en el puesto 32, sigue siendo un logro notable. Este logro es significativo para la cocina ecuatoriana.
Este reconocimiento destaca cómo un plato nacido en la humildad puede trascender fronteras. La guatita fue originalmente una receta de aprovechamiento, pensada para sacar el mayor partido a las partes menos valoradas de la res. Hoy, su sabor y elaboración la han convertido en un ícono de la gastronomía nacional.
Más allá del gusto: un símbolo cultural
Más allá de su sabor, la guatita es también un símbolo de identidad y resistencia cultural. Muchas familias ecuatorianas han transmitido esta receta de generación en generación, adaptándola con ligeras variaciones regionales, pero conservando siempre su esencia.
Es también un plato que despierta nostalgia y orgullo. Ha sido defendido por figuras públicas como el expresidente Abdalá Bucaram, quien alguna vez la calificó como “uno de los platos más ricos de la gastronomía ecuatoriana”. Para muchos, la guatita es más que comida; es una parte esencial de su historia personal.
El sabor del maní que conquista el mundo
Uno de los elementos que más destaca TasteAtlas es la profundidad del sabor que aporta la salsa de maní. Esta característica, poco común en muchas cocinas internacionales, aporta una textura cremosa y un gusto tostado que complementa perfectamente al mondongo cocido. Este detalle, sumado al uso de especias criollas, hace de la guatita un plato único en su género.
Un plato que representa el alma del Ecuador
En un momento en que la gastronomía ecuatoriana busca posicionarse internacionalmente a través de innovación y colaboración, la inclusión de la guatita en este ranking global es significativa. Es una señal clara del valor que tiene la cocina tradicional. Además, es una oportunidad para que chefs, instituciones y emprendedores del sector culinario la revaloricen. También para que promuevan estos sabores autóctonos dentro y fuera del país.
Una joya del fogón ecuatoriano
La guatita no es solo uno de los platos más populares de Ecuador; es también una expresión de su diversidad cultural. Demuestra creatividad culinaria y un profundo sentido de comunidad. Que hoy figure entre los mejores platos del mundo, según TasteAtlas, es una celebración para toda la nación. Además, es una invitación a seguir explorando la riqueza de la cocina ecuatoriana.
Fuente: Ecuavisa
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