El 11 de julio de 2024, se llevó a cabo una intervención significativa en el barrio Cuba, ubicado en el sur de Guayaquil. Durante esta operación conjunta de la Policía y las Fuerzas Armadas, se escucharon comentarios como “Casi tumban todas las casas”, lo que refleja la magnitud del operativo. El barrio, cercano al río Guayas, es identificado como un “punto caliente” debido a la incidencia de actividades delictivas.
Decomisos y detenciones
La intervención en el barrio Cuba resultó en el decomiso de armas, municiones y drogas. Además, se revisaron viviendas que habían sido ocupadas ilegalmente por bandas delincuenciales y utilizadas como centros de expendio de drogas. Un primer balance presentado por el teniente coronel Freddy Ávalos indicó que se decomisaron pistolas, municiones, drogas y cuatro motos, cuyos propietarios no pudieron confirmar su adquisición legal. En una de las viviendas allanadas se encontraron uniformes militares, y en otros casos, se descubrieron viviendas completamente abandonadas por sus propietarios debido a las actividades ilícitas y amenazas de grupos delictivos.
Un punto caliente de la ciudad
El teniente coronel Ávalos informó que la operación en el barrio Cuba dejó un detenido, quien intentó huir al notar la presencia policial. Además, se confirmó que las viviendas cercanas al río Guayas se utilizaban para almacenar o desembarcar drogas. “Por información de inteligencia, sabemos que tenemos una salida directa al Estero Salado, por donde ingresan y salen drogas y armas”, explicó Ávalos. Debido a esta situación, algunas fuerzas policiales llegaron en lanchas hasta las casas allanadas. El jefe policial enfatizó que el barrio Cuba es considerado un “punto caliente” porque registran varias muertes violentas y hay una pugna entre organizaciones delictivas. Hasta la fecha, en 2024, el distrito Sur, que incluye el barrio Cuba, ha reportado 164 crímenes.
Retiro de rejas metálicas
En el operativo participaron unos 400 agentes municipales. Se retiraron rejas metálicas que hansido colocadas en los callejones por los moradores sin permiso de la Alcaldía de Guayaquil. Las estructuras instaladas por los residentes como medida de seguridad, debido a la falta de respuesta de la policía en emergencias pasadas. Los vecinos argumentaron que en situaciones anteriores llamaron al ECU 911 y la “policía nunca acudía”.
La intervención en el barrio Cuba es un paso importante para enfrentar las actividades delictivas en uno de los sectores más peligrosos de Guayaquil. La Policía y las Fuerzas Armadas continúan trabajando para devolver la tranquilidad y seguridad a los habitantes de esta zona.
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