La policía metropolitana de Londres ha informado sobre el arresto de un sospechoso relacionado con una serie de incendios provocados contra el primer ministro británico, Keir Starmer. El detenido, un joven de 21 años, fue aprehendido durante la madrugada del martes 13 de mayo. Está siendo investigado por su presunta implicación en tres incidentes recientes que habrían puesto en riesgo la vida de personas, según el comunicado oficial.

Inicio de la investigación y contexto político
La unidad antiterrorista inició formalmente la investigación como medida de precaución, dada la conexión de los hechos con una figura pública de alto perfil. Los incendios provocados contra el primer ministro británico ocurrieron en propiedades anteriormente asociadas con Starmer. Aunque actualmente reside en Downing Street, la residencia oficial del jefe de gobierno, las propiedades afectadas mantenían vínculos con su pasado residencial.
El primer incidente tuvo lugar en la noche del domingo al lunes, en el barrio de Kentish Town, al norte de Londres. Aunque no hubo heridos, se registraron daños materiales significativos en la entrada del domicilio. Este fue el lugar de residencia del actual jefe de gobierno hasta su traslado, en julio de 2024, tras su victoria electoral.
Conexiones entre los incidentes y la respuesta oficial
Además del ataque en Kentish Town, la policía relaciona al sospechoso con otros dos eventos. El segundo incidente ocurrió la mañana del domingo, en Islington, en otra vivienda relacionada con el primer ministro. Se trató de un pequeño incendio en la entrada de un edificio de apartamentos. El tercer episodio se registró el 8 de mayo, también en Kentish Town, cuando un vehículo fue incendiado.
Las autoridades consideran que estos tres hechos podrían estar conectados como parte de una campaña dirigida. La naturaleza reiterativa de los incendios provocados contra el primer ministro británico ha elevado la preocupación dentro del gobierno y de los cuerpos de seguridad.
Repercusiones y próximos pasos
Actualmente, el sospechoso permanece bajo custodia a la espera de ser interrogado. La investigación sigue abierta y, de confirmarse la motivación política, el caso podría escalar en gravedad. Los incendios provocados contra el primer ministro británico podrían representar no solo un delito contra la propiedad, sino una amenaza directa a la seguridad del Estado.
En este contexto, se intensifica el debate sobre la protección de figuras públicas y la vigilancia de actos que podrían calificarse como extremistas. Las autoridades, por tanto, continuarán indagando con detenimiento las posibles motivaciones y vínculos del acusado.
Más noticias:
Aeropuerto de Charleroi: Alerta de bomba
Fuente: