El Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ha anunciado una investigación sobre la venta del emblemático Hotel Quito, calificada como “oscura” por parte de su presidente del Consejo Directivo, Eduardo Peña. Este anuncio llega después de ocho años de la polémica transacción, que ahora está siendo examinada de cerca debido a posibles irregularidades.
Una venta bajo sospecha
El Hotel Quito, una joya arquitectónica en la capital ecuatoriana, fue vendido en 2016 a la empresa China Road and Bridge Corporation (CRBC) por un total de USD 30,8 millones. Sin embargo, el proceso de venta ha sido cuestionado desde el principio, siendo descrito por Peña como “bastante oscuro”. Según Peña, se está investigando la posibilidad de que la venta no fuera completamente legítima y se está evaluando la viabilidad de recuperar el activo para el IESS.
Cuestionamientos y denuncias
La venta del hotel durante la administración de Richard Espinosa, ex presidente del Consejo Directivo del IESS y delegado del presidente Rafael Correa, ha generado controversia. Aunque no se registraron observaciones en un informe de la Contraloría, la auditoría fue firmada por el excontralor General del Estado, Carlos Polit, quien fue condenado por lavado de activos en Estados Unidos. Esta situación ha levantado sospechas y ha llevado al IESS a enviar información relevante sobre la transacción a la Fiscalía.
Respuesta a la Comisión Nacional Anticorrupción
La indagación del IESS se produce en respuesta a una denuncia presentada por la Comisión Nacional Anticorrupción (CNA) en 2020. La CNA argumenta que la venta del Hotel Quito fue irregular y aboga por su reversión al IESS para proteger un bien patrimonial. La institución ha atendido el pedido de la Fiscalía y está cooperando activamente en la investigación.
Conflicto con la comunidad y medidas cautelares
Además de la controversia en torno a la venta del hotel, la propietaria actual, CRBC, ha enfrentado desafíos con la comunidad local. La empresa busca desarrollar proyectos inmobiliarios en los terrenos adyacentes al hotel, lo que ha generado tensiones con los vecinos de la zona. En marzo de 2024, un tribunal local emitió medidas cautelares a favor de los vecinos y la CNA, ordenando la suspensión de trámites y permisos relacionados con los proyectos inmobiliarios hasta que se resuelva la actualización de la ficha de inventario del Hotel Quito.
El caso del Hotel Quito refleja los desafíos que enfrenta Ecuador en su lucha contra la corrupción y la gestión transparente de los recursos públicos. La investigación en curso del IESS y la colaboración con las autoridades judiciales son pasos importantes hacia la rendición de cuentas y la justicia. Mientras tanto, la comunidad y las partes interesadas observan de cerca el desarrollo de esta situación, en espera de una resolución que garantice la protección del patrimonio y el interés público.
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