Francisco Sebastián Barreiro Abad fue sometido a una orden de prisión durante la madrugada del viernes 22 de marzo de 2024, tras comparecer en la audiencia de formulación de cargos en el Complejo Judicial Norte de Quito. Su detención se llevó a cabo la mañana anterior en Cuenca (Azuay) como parte de la operación identificada por la Fiscalía como el caso Nene.
El individuo bajo investigación, Francisco Barreiro, es el hijo de la vicepresidenta de la República del Ecuador, Verónica Abad, quien se encuentra en Israel en cumplimiento de deberes asignados por el presidente Daniel Noboa. El presunto delito de Barreiro está vinculado a la institución que su madre lidera: la Vicepresidencia. Según las pesquisas, se le atribuye haber ofrecido puestos de trabajo y cobrar mensualidades basadas en los salarios, una vez que las personas ocupaban dichos puestos. Supuestamente, estos pagos debían realizarse de manera regular. Durante la fase de instrucción, que sigue a la formulación de cargos, la Fiscalía deberá sustentar las acusaciones, mientras que la defensa del acusado buscará refutarlas y demostrar su inocencia.
El delito imputado al hijo de Verónica Abad es el tráfico de influencias, según lo estipulado en el artículo 286 del Código Orgánico Integral Penal (COIP). Este delito implica el aprovechamiento de la posición oficial para influir en otros servidores públicos con el fin de obtener beneficios personales o para terceros.
La legislación define el tráfico de influencias en el artículo 285 del COIP como el uso indebido de la autoridad o relaciones personales para obtener favores o resoluciones favorables. El delito castiga tanto a quienes solicitan dádivas o recompensas como a quienes las ofrecen. En caso de ser hallado culpable, Barreiro podría enfrentar una pena de prisión de tres a cinco años.
La vicepresidenta Verónica Abad y el presidente Daniel Noboa, aunque ocupan altos cargos en el gobierno ecuatoriano, actualmente mantienen una relación distante.
Fuente:
www.expreso.ec
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