Zonas críticas para la seguridad institucional
La violencia contra funcionarios públicos y figuras políticas en Ecuador ha alcanzado niveles alarmantes desde 2022. Un análisis de la organización internacional Acled (Armed Conflict Location & Event Data) revela que Guayaquil, Durán y Manta concentran los ataques más letales. Esta violencia afecta a candidatos, autoridades electas, fiscales, agentes de tránsito y otros funcionarios públicos.
En particular, Durán, en la provincia de Guayas, suma 32 ataques. Este cantón, vecino a Guayaquil, se consolida como un epicentro de violencia política en Ecuador, con hechos que incluyen atentados armados, secuestros y explosiones. La violencia contra funcionarios públicos crece en frecuencia y letalidad, vinculada al avance del crimen organizado.
Crímenes organizados y letalidad creciente
Entre 2022 y mayo de 2025, Acled registró 351 incidentes de violencia política en Ecuador. De estos, 240 han terminado en muertes, lo que evidencia una tendencia ascendente. Solo en 2023 se reportaron 147 eventos violentos, incluyendo el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio.
Guayaquil lidera con 35 incidentes y 28 muertes, seguida por Manta, que pese a registrar 23 ataques, acumula 25 fallecimientos. La violencia contra funcionarios públicos no solo se concentra en alcaldes, sino también en personal penitenciario, judicial y de tránsito, sectores claves para las operaciones criminales.
El caso crítico de Durán
Desde el atentado contra el alcalde Luis Chonillo en mayo de 2023, Durán ha sido escenario de múltiples crímenes. Se cuentan asesinatos de concejales, fiscales y familiares de exautoridades. La vicealcaldesa Jessika Solís renunció tras un ataque con explosivos a una escuela vinculada a su familia.
Además, el juicio contra alias ‘Negro Tulio’ ha salpicado al actual alcalde, quien reside fuera del país. Esta situación ilustra cómo la violencia contra funcionarios públicos puede afectar directamente la gobernabilidad local y nacional.
Contexto estructural de la violencia
Los datos de Acled reflejan que los ataques suelen responder a disputas territoriales entre bandas. Estas organizaciones buscan controlar las instituciones mediante amenazas o represalias. Casos como los asesinatos de los alcaldes de Portovelo y Camilo Ponce Enríquez muestran que el crimen organizado no tolera interferencias, especialmente en zonas mineras.
Por otra parte, la infiltración en agencias de tránsito es una táctica frecuente. En Manta, por ejemplo, se han registrado asesinatos e incendios en oficinas públicas, en el marco de disputas entre Los Lobos y Los Choneros.
Elecciones: puntos críticos de violencia
La violencia contra funcionarios públicos en Ecuador tiende a intensificarse durante procesos electorales. En los comicios de 2023, murieron 99 personas en incidentes vinculados a violencia política. Este dato revela el profundo entrelazamiento entre el crimen organizado y los procesos democráticos.
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