En un entorno laboral en constante cambio, la Universidad Nebrija se posiciona como una institución clave para enfrentar los desafíos de la era digital. Según el Foro Económico Mundial 2023, seis de cada diez trabajadores necesitarán desarrollar nuevas habilidades digitales antes de 2027 para mantenerse competitivos en el mercado. Este escenario resalta la importancia del aprendizaje continuo o “long life learning”, que exige a los profesionales actualizar sus conocimientos cada dos años.
Habilidades tecnológicas: el nuevo requisito laboral
La Universidad Nebrija reconoce la creciente demanda de competencias tecnológicas en el mercado laboral. Eva Iglesias, directora académica del Máster en Liderazgo y Dirección de Recursos Humanos de la universidad, explica que muchas posiciones laborales actuales no existían hace solo dos años. Incluir habilidades tecnológicas en el currículum abre oportunidades laborales y reduce el desempleo”, afirma Iglesias.
Por otra parte, en Ecuador, la tasa de desempleo alcanzó el 4,1% en el primer trimestre de 2024, en comparación con el 3,8% del año anterior, según el INEC. Ante esta situación, la actualización constante de competencias tecnológicas es fundamental para mejorar la empleabilidad.
La importancia del aprendizaje continuo en la Universidad Nebrija
La Universidad Nebrija se ha adaptado a esta nueva realidad, ofreciendo programas académicos que preparan a sus estudiantes. Para dominar herramientas clave en la transformación digital.
Iglesias destaca que, en cualquier profesión. También, es esencial dominar habilidades como el análisis de datos, big data, inteligencia artificial y programas de gestión como Python, Power BI y PostgreSQL.
Adaptación al mercado laboral digitalizado
Asimismo, la Universidad Nebrija no solo ofrece una sólida base académica, sino que también prepara a sus estudiantes para el entorno laboral digitalizado.
“Incorporamos herramientas tecnológicas a los títulos de Grado y Máster para garantizar que los graduados tengan las habilidades necesarias. Para enfrentar los desafíos laborales actuales”, concluye Iglesias.
Este enfoque proactivo asegura que los profesionales estén equipados para aprovechar las oportunidades que ofrece la transformación digital y enfrentar con éxito el futuro del trabajo.
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