Durante la mañana del viernes 2 de mayo de 2025, un potente terremoto de 7.5 en el extremo sur de Chile sacudió violentamente la Región de Magallanes, generando preocupación en autoridades y población. El fenómeno telúrico, registrado a las 08:58 hora local, tuvo su epicentro a 218,1 kilómetros al sur de Puerto Williams, con una profundidad de tan solo 10 kilómetros, según reportó el Centro Sismológico Nacional.
El evento sísmico, de profundidad superficial, hizo que el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) activara rápidamente una alerta de tsunami. La alarma afectó a todo el borde costero de la región, incluyendo importantes localidades como Punta Arenas, Puerto Williams y también al Territorio Antártico Chileno.
Evacuaciones inmediatas y alerta en zonas costeras
Debido a la magnitud del sismo, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) coordinó con el SHOA la evacuación preventiva del borde costero. Además, se declaró estado de precaución en áreas de playa del Territorio Antártico Chileno, como parte del protocolo establecido ante riesgos marítimos.
El presidente Gabriel Boric, originario de Punta Arenas, pidió a la ciudadanía respetar las instrucciones oficiales a través de la red social X (antes Twitter). “Llamamos a evacuar el borde costero en toda la Región de Magallanes. En estos momentos, nuestro deber es prevenir y hacer caso a las autoridades”, escribió.
Autoridades activan protocolos y se mantiene la calma
Al mismo tiempo, el Comité para la Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid) se activó a nivel regional y nacional para coordinar las acciones de respuesta. El mandatario aseguró que “todos los recursos del Estado están a disposición para atender la emergencia”, subrayando el compromiso gubernamental frente a esta situación crítica.
Aunque no se han reportado personas heridas ni daños materiales hasta el momento, las autoridades continúan monitoreando atentamente el comportamiento del mar. La evacuación de las zonas costeras se ha realizado con serenidad, reflejando la preparación ciudadana ante catástrofes naturales.
Este terremoto de 7.5 en el extremo sur de Chile ha vuelto a poner de manifiesto la vulnerabilidad sísmica del país y la necesidad de mantener sistemas de alerta eficientes, así como una cultura preventiva entre la población.
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