La violencia en Ecuador alcanzó un nuevo nivel de brutalidad el domingo 27 de julio de 2025. Cuando al menos 17 personas fueron asesinadas en dos ataques armados perpetrados en el poblado costero de La Guayas, en el suroeste del país. Además, otras 14 personas resultaron heridas, una de ellas en estado crítico. La Policía Nacional confirmó los hechos el lunes 28, atribuyendo la masacre a una de las principales bandas del crimen organizado que operan en territorio ecuatoriano: Los Lobos.

Los primeros reportes señalan que quince víctimas fueron ejecutadas con pistolas y fusiles en las afueras de una licorería, mientras que otras dos fueron asesinadas a pocas cuadras del lugar. En redes sociales circulan videos desgarradores en los que se escucha a familiares gritar de dolor y desesperación junto a los cuerpos tendidos sobre el asfalto.
“Lobos activos”: el grito que sembró el terror
El mayor Óscar Valencia, jefe policial de la zona, reveló que testigos escucharon a los agresores gritar “¡Lobos activos!” al momento de perpetrar el ataque, una señal de que se trataba de un operativo de la banda criminal Los Lobos. Esta organización ha ganado terreno en los últimos años. Expandiéndose a 16 de las 24 provincias del país, y compite violentamente con otras mafias como Los Choneros por el control del narcotráfico y otras economías ilegales.
El ataque parece haber sido dirigido, aunque aún no se confirma si fue un ajuste de cuentas entre bandas o un acto deliberado para generar terror. “La hipótesis que manejamos es que los asesinos iban tras una persona específica”, indicó el oficial Valencia. No obstante, no se descarta que el fuego haya sido abierto indiscriminadamente contra civiles.
Cuerpos en las calles y una comunidad paralizada por el miedo
Los testimonios recabados en el lugar describen escenas dantescas. Entre los fallecidos hay un menor de edad que, pese a estar herido, logró correr más de un kilómetro antes de morir. Las víctimas, en su mayoría sin antecedentes penales, fueron sorprendidas en plena vía pública. Los peritos policiales levantaron al menos 37 indicios balísticos en el área.
En las calles, aún marcadas por charcos de sangre y mesas derribadas, el miedo y la incertidumbre se han apoderado de la comunidad. Las familias temen nuevos ataques y exigen mayor protección de las autoridades.
Narcoviolencia sin freno: Ecuador lidera en homicidios en América Latina
Ecuador se ha transformado en uno de los países más violentos de América Latina, superando en 2024 una tasa de 38 homicidios por cada 100.000 habitantes. Según cifras de Insight Crime. La disputa entre bandas criminales, muchas con vínculos con cárteles de México y Colombia, ha llevado a una escalada de violencia inédita.
Las prisiones se han convertido en centros de operaciones de las organizaciones criminales. Las masacres tanto dentro como fuera de los centros penitenciarios son cada vez más frecuentes. La inseguridad afecta a poblaciones urbanas y rurales por igual, con ataques armados que antes eran impensables en comunidades pequeñas como La Guayas.
El Estado responde con militarización y estado de conflicto interno
Ante el colapso del sistema penitenciario y la imposibilidad de controlar el accionar de las bandas, el presidente Daniel Noboa declaró en 2024 al país en “conflicto armado interno”. Permitiendo el despliegue de militares en calles, cárceles y zonas de alto riesgo. Sin embargo, hechos como el de La Guayas ponen en duda la efectividad de las medidas implementadas y evidencian que las organizaciones criminales siguen teniendo capacidad operativa y poder de fuego.
Las autoridades insisten en que continuarán con los operativos en la zona para identificar y capturar a los responsables. Aunque hasta ahora no se ha informado sobre detenciones vinculadas al caso.
La masacre de La Guayas es un nuevo y doloroso recordatorio de la grave crisis de seguridad que enfrenta Ecuador. Mientras las bandas criminales expanden su control territorial y siembran el terror. Las políticas estatales aún no logran contener la violencia ni brindar respuestas efectivas a las comunidades afectadas. La lucha contra el crimen organizado requiere acciones urgentes, coordinadas y sostenidas en el tiempo, con un enfoque que combine seguridad, justicia y prevención.
Fuente: Barron’s (AFP)
Te puede interesar:
Ecuador responde a Colombia tras polémica por deportación de presos: “No hay expulsiones colectivas”