Cierre temporal impactará vuelos en Quito este 31 de mayo
El Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito suspenderá temporalmente sus operaciones aéreas este sábado 31 de mayo. Esta medida, que implica la reprogramación de vuelos, forma parte de un plan de mantenimiento preventivo autorizado por la Dirección General de Aviación Civil. Las actividades en pista estarán suspendidas desde las 02:00 hasta las 14:00. A pesar de la pausa en los vuelos, la terminal de pasajeros continuará abierta.
Los cierres buscan evitar situaciones imprevistas que puedan afectar la seguridad de las operaciones. Durante esta jornada, la reprogramación de vuelos será necesaria para garantizar un servicio eficiente y seguro.
Reprogramación de vuelos y coordinación con aerolíneas
La Corporación Quiport compartió un listado actualizado con los itinerarios reprogramados. Las aerolíneas proporcionaron esta información, y cada pasajero debe verificar directamente el estado de su vuelo con su respectiva compañía aérea.
La coordinación previa ha sido clave para reducir el impacto en los usuarios. En total, se han programado varios cierres durante los sábados de junio y septiembre, días elegidos por su bajo tráfico aéreo. No habrá interrupciones en julio ni agosto, meses de mayor actividad turística.
Importancia del mantenimiento preventivo
El objetivo de estas actividades es prolongar la vida útil de la pista y evitar intervenciones correctivas imprevistas. Este enfoque planificado busca minimizar los riesgos operativos y fortalecer la seguridad en los despegues y aterrizajes.
La reprogramación de vuelos también permite mantener un estándar alto de calidad en los servicios del aeropuerto. Así se garantiza que los usuarios tengan una experiencia más segura y sin complicaciones.
Recomendaciones para los viajeros
Las autoridades recomiendan a todos los pasajeros revisar con anticipación los cambios en su itinerario. Cada aerolínea ofrece canales oficiales de comunicación que los pasajeros deben utilizar para confirmar los detalles del vuelo.
Aunque la reprogramación de vuelos podría generar algunas molestias, se trata de una medida temporal necesaria para preservar la eficiencia y seguridad del aeropuerto. La planificación y comunicación oportuna reducen al mínimo el impacto para los pasajeros.
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