El primer mes de la Asamblea Nacional, que concluyó el 14 de junio de 2025, dejó una serie de controversias, disputas internas y decisiones legislativas aceleradas. Este periodo estuvo marcado por los llamados “camisetazos”, el uso recurrente de discursos leídos y la aprobación de leyes sin un debate profundo. La gestión de Niels Olsen, presidente del Legislativo, ha generado críticas desde varios sectores políticos.
Consolidación del oficialismo y fisuras en la oposición
Durante el primer mes de la Asamblea, la bancada de Acción Democrática Nacional (ADN) afianzó su control gracias al respaldo de asambleístas independientes, miembros del Partido Social Cristiano (PSC) y parte de Pachakutik. Esta coalición informal permitió que el oficialismo apruebe normativas sin mayores obstáculos. En contraste, la Revolución Ciudadana vivió una crisis interna que redujo su bloque de 67 a 64 legisladores.
Niels Olsen y una presidencia cuestionada desde el inicio
Niels Olsen fue elegido presidente de la Asamblea con 80 votos. En su discurso inicial apeló a un debate basado en ideas, y aseguró que su gestión defendería la diversidad política. Sin embargo, en esa misma sesión, su bancada ocupó todos los cargos del Consejo de Administración Legislativa (CAL), lo que provocó duras reacciones del correísmo y de fracciones de Pachakutik y el PSC.
Denuncias de censura y decisiones calificadas como populistas
Durante el primer mes de la Asamblea, la oposición ha acusado al oficialismo de restringir el debate en el Pleno. El caso más tenso se produjo cuando el correísmo apeló la presidencia al intentar revertir un cambio en el orden del día. Además, Olsen anunció sesiones plenarias de lunes a miércoles por la mañana, algo que no se ha cumplido. También impuso sanciones económicas a 21 legisladores ausentes en una sesión.
Camisetazos y fracturas partidarias
El primer mes de la Asamblea también dejó múltiples “camisetazos”. David Arias, Sergio Peña y Mónica Salazar abandonaron la línea de la Revolución Ciudadana para votar con el oficialismo. Al menos 14 asambleístas de ese bloque se abstuvieron en votaciones clave. En Pachakutik, seis legisladores fueron expulsados por apoyar la Ley de Solidaridad Nacional. Y en el PSC, Samuel Celleri abandonó el bloque para unirse al oficialismo.
Leyes económicas urgentes y legislación polémica
En este periodo, el Ejecutivo envió tres proyectos de ley económica urgente. El primero, la Ley de Solidaridad Nacional, se aprobó antes del plazo con 84 votos. El segundo, sobre contratación y servicio público, llegó recientemente al Pleno. El tercero busca atraer inversión en zonas protegidas con presencia criminal. En paralelo, la Asamblea aprobó la Ley de Inteligencia, criticada por ampliar las atribuciones del CIES en tareas de vigilancia.
Debates con bajo nivel parlamentario
El nivel del debate legislativo durante el primer mes de la Asamblea fue pobre. El asambleísta Alfredo Serrano, del PSC, actuó como secretario temporal en la sesión inaugural, con evidentes fallos en el procedimiento. Sade Fritschi, vocal del CAL, fue criticada por leer todo su discurso en el debate de la Ley de Solidaridad. Algo similar ocurrió con Camila Cueva, de ADN, quien leyó su intervención completa en el debate sobre la Ley de Inteligencia.
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