Dr. Jorge Norero González/Guayaquil
Cómo están amigos queridos, escribo este mensaje mientras estoy volando, cruzando el vasto mar Atlántico hacia Europa, donde permaneceré algunos días, y desde Londres iniciaré un largo recorrido que os iré contando para que estéis junto a mí y mis pensamientos.
Pero mientras el avión recorre hacia su destino, no puedo encontrarme con la paz que ansío, pues son tantas mis preocupaciones, no sólo por los graves problemas que vivimos en Ecuador, las enormes incertidumbres, los escándalos, buenas y malas noticias, ahora el conflicto en medio oriente le agrega al mundo una gran interrogante, el mundo es un polvorín y parecería vivimos una batalla perdida, en donde encontrar paz y armonía son solos palabras que riman en una poesía…
Cómo ser libres y volar, dejar que todo nos resbale cuando somos víctimas del odio, complejos y hasta codicia y prepotencia de personas totalmente desquiciadas por el poder y la maldad…
Si no es por odios tribales ancestrales, religiosos o por un pedazo de tierra, envidia o maledicencia, jamás dejaremos de mirar rivalidades, prejuicios, o intentos estúpidos por creernos superiores y por supuestos que exigen reconocimiento y sumisión para sentirse satisfechos…
Ahora la cada vez más fuerte unión y rivalidad que con toda seguridad el BRIC está cada vez más fuerte, creado para desafiar a U.S. A y a la Unión Europea, es muy probable que aquel desafío conforme la tormenta perfecta para una conflagración mundial, no sólo con armas, cuanto en otros ámbitos como el económico, tecnológico, etcétera…
Pero debo hacer un paréntesis, pues no dejo de meditar que la formación de ese bloque, apenas dos de esos países como Venezuela y Brasil, están terriblemente contaminados por el cáncer del narcotráfico, mientras que los grandes como China, Rusia e India, que juntos son casi un tercio y medio de la población mundial, han construido enormes estructuras internas en donde son casi impenetrables a aquellos factores que está demoliendo las estructuras internas de las grandes potencias de occidente, y la otra amenaza que los occidentales están sometidos es la contaminación migratoria de fundamentalistas, virus y bacterias humanas, que alientan perdidas de valores, principios, costumbres, causa inequívoca de la implosión que está por estallar dejando en ruinas y en total destrucción culturas y civilizaciones…
Cálmate y disfruta, aprovecha la oscuridad y el vasto silencio de mi interior, me digo y me dicen… creí que con los años estas cosas dejarían de importarme, la vida misma me impondría nuevas prioridades, pero debo aceptar que el destino es quien escribe mi ruta y el camino, huellas que debo dejar o tengo que marcar… no me importa que muchos lean, me basta con que por lo menos, unos pocos se detengan y reflexionen sobre estos temas…
Seguiremos en contacto abrazos y muchas bendiciones.
Fuente: La nación
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