Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres insensatos; como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios. 1 Pedro 2:15-16
El actuar bien no siempre hace callar a las personas malas pero sí deja en evidencia su ignorancia e insensatez con la que actúan, es como si se les pusiera un bozal que detiene su desenfreno y su maldad, ya que el mal siempre se va a incomodar con las personas de bien, les molesta hasta su presencia. Estas personas insensatas, ignorantes, son aquellos que desvían y pervierten la verdad, tal cual actuaban los fariseos de aquella época, porque la desconocen, pero un siervo de Dios debe hacer uso de esa libertad que ha recibido en Cristo Jesús para hacer la voluntad de Dios, y esa voluntad es la santificación, el apartarse del mal, callando esa ignorancia a través de hacer el bien. Así es como actúa un siervo de Dios, andando en la verdad siempre callando la ignorancia de los que se oponen a ella. Para reflexionar: ¿De qué manera usted evidencia la libertad que ha obtenido en Cristo Jesús? ¿Su libertad le permite ser un verdadero siervo de Dios?
Fuente: La nación
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