Las autoridades municipales de Quito están evaluando la posibilidad de ampliar la línea de servicio del Metro de Quito hasta el área de Calderón, al extremo norte del Distrito Metropolitano. El alcalde Pabel Muñoz López considera que este proyecto no solo modernizará, sino también agilizará la movilidad de los residentes en la parroquia más poblada de Ecuador.
Muñoz destacó que Calderón tiene una población que supera en un 35% a la capital de Cotopaxi, Latacunga, y enfrenta diversas necesidades, especialmente en cuanto al transporte público.
En opinión del alcalde, es fundamental que cualquier extensión del Metro no se limite solo a La Ofelia, sino que llegue hasta Calderón. Aunque la segunda línea originalmente estaba planeada para cubrir el tramo Labrador-La Ofelia, Muñoz resalta la importancia de considerar a Calderón, con medio millón de habitantes, para la planificación de esta iniciativa.
Muñoz agregó que, una vez que entre en funcionamiento la obra más significativa en la historia de la capital en diciembre próximo, se debe comenzar a pensar en una extensión. Si bien son proyectos a largo plazo, requieren una planificación anticipada.
La propuesta es que la extensión llegue hasta el redondel de Carapungo. Esto cambiaría la forma en que se accede a la capital desde el norte de la ciudad, evitando que la referencia sea únicamente Carcelén. Además, se considera ubicar el terminal terrestre en esta zona, en colaboración con el Metro de Quito, lo que impulsaría aún más el desarrollo de la parroquia.
El plan de expansión del Metro de Quito busca no solo mejorar la movilidad, sino también contribuir al crecimiento y progreso de las áreas aledañas, ofreciendo una solución de transporte integral a los habitantes de la capital.
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