Luis Alfonso Chango, empresario indígena, presidente vitalicio del equipo de fútbol Mushuc Runa y gerente general de la Cooperativa de Ahorro y Crédito Mushuc Runa, es un ejemplo claro de cómo se puede construir riqueza desde cero. Con un patrimonio que supera los 15 millones de dólares, Chango ha alcanzado el éxito mediante disciplina, educación financiera y una estrategia bien definida. En este artículo, compartimos tres claves fundamentales que han sido determinantes en su trayectoria y que pueden servir de guía para quienes desean mejorar sus finanzas personales.
1. Gasta solo en lo verdaderamente importante
Uno de los errores más comunes en las finanzas personales es no tener control sobre los gastos, especialmente aquellos pequeños pero constantes que parecen inofensivos. Las compras impulsivas, suscripciones innecesarias o el deseo de mantener un estilo de vida que está por encima de los ingresos personales son hábitos que, con el tiempo, afectan gravemente la capacidad de ahorro.
Luis Alfonso Chango ha sido claro en este aspecto: gastar menos no es un sacrificio, sino una estrategia inteligente. Según Chango, no se trata de restringir el disfrute, sino de priorizar lo esencial y comprender que cada centavo puede ser una semilla de futuro si se utiliza adecuadamente.
Consejo práctico: Realiza un presupuesto mensual y clasifica tus gastos en tres categorías: esenciales, deseables y prescindibles. Elimina o reduce al mínimo los gastos de la tercera categoría y reinvierte ese dinero en tu fondo de ahorro o educación.
2. La educación financiera es clave
Luis Alfonso Chango comenzó a manejar dinero desde joven, no a través de las aulas tradicionales, sino observando y aprendiendo de las prácticas diarias de su familia. A lo largo de su vida, ha promovido la importancia de la educación financiera, algo que considera esencial para lograr el éxito, independientemente del origen o las condiciones familiares.
Hoy en día, Chango impulsa el acceso a la educación financiera a través de su cooperativa, ofreciendo talleres comunitarios gratuitos en distintas zonas de Ecuador, buscando empoderar a más personas para tomar decisiones financieras informadas.
Consejo práctico: Dedica al menos una hora a la semana para formarte en temas financieros. Puedes empezar con libros, podcasts o videos gratuitos que aborden presupuestos, ahorro, inversión y economía doméstica.
3. Invertir con propósito
“No basta con ahorrar, hay que saber multiplicar”, afirma Chango. El ahorro es solo el primer paso; el siguiente, y más importante, es aprender a invertir. Chango ha invertido en lo que mejor conoce: su comunidad, su gente, su equipo de fútbol y su cooperativa. Estas inversiones no solo le han traído retornos financieros, sino que también han tenido un impacto social significativo.
Para él, la verdadera riqueza no se mide solo en términos de dinero, sino en cuánto contribuyes al desarrollo de los demás. La inversión inteligente no requiere grandes sumas de dinero, sino la capacidad de identificar oportunidades, asumir riesgos calculados y tener paciencia para ver crecer los resultados.
Consejo práctico: Comienza con pequeñas inversiones, ya sea en un fondo colectivo, en acciones fraccionadas o incluso emprendiendo algo propio. Lo importante es hacerlo con conocimiento, objetivos claros y control del riesgo.
Tres empresarios indígenas que conquistaron el éxito desde la pobreza
Luis Alfonso Chango es un ejemplo claro de que es posible salir adelante, incluso desde contextos de extrema pobreza. Su éxito no se basa en la suerte, sino en una estrategia bien fundamentada que incluye disciplina en el gasto, educación constante y una inversión con propósito. Su vida y su mensaje son claros: no importa cuánto ganes hoy, sino cómo usas lo que tienes y hacia dónde te proyectas.
Consejo práctico: Empieza a tomar decisiones inteligentes hoy mismo, una a la vez, para transformar tu presente económico en un futuro próspero. La riqueza no solo se mide en términos monetarios, sino también en el impacto que puedas generar en tu entorno.
Luis Alfonso Chango demuestra que el camino hacia la riqueza es accesible para todos, sin importar las circunstancias. Su filosofía de vida está basada en tres pilares fundamentales: gastar con conciencia, educarse financieramente y realizar inversiones con propósito. Estos principios son aplicables por cualquier persona dispuesta a cambiar su enfoque hacia el dinero y la prosperidad.
Fuente: Primicias
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