El bloque ITT, operado por Petroecuador, ha registrado un destacado desempeño en la producción petrolera. El 24 de julio de 2024, ITT reportó una producción de 51.718 barriles diarios, superando su meta en un 115,33%. Este resultado asegura al ITT una posición destacada en el ranking de producción de la empresa estatal, ubicándose como el cuarto bloque en productividad, después de Sacha, Auca y Shushufindi.
La producción de ITT representa un 13,4% del total de la producción diaria de Petroecuador, que alcanzó los 384.826 barriles ese mismo día. Esta cifra subraya la importancia del bloque en la operación general de la empresa. Sin embargo, el futuro del ITT está en juego debido al mandato constitucional derivado de la consulta popular realizada en agosto del año pasado, que exige un cierre progresivo del bloque.
ITT y su papel en la producción de Petroecuador
El bloque ITT es fundamental para la producción de Petroecuador, destacándose entre los 14 bloques bajo su gestión. A pesar de su alto rendimiento, el bloque se enfrenta a un inminente cierre debido a los resultados de la consulta popular. Esta decisión obliga a la empresa a cerrar el bloque en un plazo de un año, comenzando en agosto. La posibilidad de perder una fuente de ingresos de aproximadamente $1.000 millones anuales ha generado un intenso debate sobre la viabilidad del cierre en el tiempo estipulado.
La consulta popular y su impacto en ITT
La consulta popular de agosto del año pasado resolvió que se debe detener la explotación petrolera en el bloque ITT. Este mandato constitucional ha puesto en tensión la operación de Petroecuador, que enfrenta la tarea de cumplir con esta directiva mientras mantiene la producción actual. La decisión de cerrar el bloque ha sido interpretada por algunos como una medida necesaria para la protección ambiental. Sin embargo, otros cuestionan el impacto económico y la viabilidad del cierre en el plazo establecido.
Respuesta de la Corte Constitucional y sus implicaciones
En mayo de 2023, la Corte Constitucional aprobó la consulta popular que llevó al actual mandato de cierre del bloque ITT. Petroecuador había solicitado aclaraciones sobre el tiempo para el cierre y posibles indemnizaciones por incumplimiento de contratos. La Corte, sin embargo, se mantuvo firme en su decisión, indicando que no se otorgaría más tiempo para la transición y que no se considerarían las solicitudes de aclaración sobre indemnizaciones sin una documentación adecuada.
La Corte también confirmó que Petroecuador no podrá establecer nuevos contratos para la extracción de petróleo en el bloque 43. Esta directiva es clara en cuanto a la prohibición de nuevas actividades contractuales relacionadas con el bloque ITT, marcando un cambio significativo en la estrategia operativa de la empresa.
El futuro incierto del bloque ITT
El cierre del bloque ITT en el plazo establecido plantea desafíos significativos para Petroecuador. La empresa debe equilibrar la necesidad de cumplir con la normativa constitucional mientras enfrenta la presión de mantener la producción. Ademàs, debe gestionar los impactos económicos y operativos. Este contexto genera incertidumbre sobre cómo se llevará a cabo la transición y cuáles serán las implicaciones a largo plazo para la industria petrolera y la economía del país.
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