Un escalofriante suceso, conocido como el Intento de Asesinato en Quito por Gato Ingeniero Sobrevive, aconteció en la apacible zona de Carcelén, al norte de la capital, donde un ingeniero de 52 años escapó milagrosamente de un intento de asesinato perpetrado por dos individuos. La motivación detrás de este violento acto radicó en una acusación insólita: la presunta responsabilidad del ingeniero en la defunción del felino perteneciente a uno de los agresores.
Un Asalto Inesperado en la Tranquilidad del Hogar
Según consta en el exhaustivo expediente del caso, el ingeniero se encontraba absorto en sus labores informáticas en la sala de su residencia cuando un súbito estruendo en la puerta principal interrumpió la serenidad del ambiente. Al investigar la causa del ruido, fue abruptamente abordado por dos desconocidos, quienes lo atacaron con violencia física. La víctima testificó el aterrador anuncio de los maleantes: “Vinimos a despojarte de tus pertenencias y a quitarte la vida”.
Reconocimiento del Agresor y Escalada de Violencia
En medio del forcejeo desesperado con los delincuentes, el ingeniero discernió con horror que uno de los asaltantes era un joven que previamente había residido en una de sus propiedades en calidad de inquilino, cesando su arrendamiento hacía poco más de veinte días. Este individuo había ocupado la vivienda durante un bimestre. De manera implacable, el exinquilino inmovilizó al ingeniero mediante una llave de estrangulamiento, mientras su cómplice registraba afanosamente el dormitorio en busca de objetos de valor. Ante la infructuosa búsqueda, el segundo agresor empuñó un arma blanca y la colocó amenazantemente sobre el abdomen de la víctima, con la clara intención de infligir una herida punzocortante.
Una Acusación Inaudita y un Respiro Fugaz
En un momento crítico, la consciencia comenzaba a abandonar al ingeniero. Entonces percibió las acusadoras palabras de su exarrendatario. Lo culpaba directamente de la trágica muerte de su amado gato. Con la escasa energía que le restaba, el ingeniero refutó la acusación. Explicó que la puerta del departamento del joven había quedado abierta. Esto permitió la fuga del animal.
Instantes de Terror y una Discusión Macabra
Los criminales, sin mostrar ápice de remordimiento, ataron de manos al ingeniero y lo condujeron a su dormitorio, donde intentaron sofocarlo utilizando una almohada. Ante la resistencia de la víctima, el exinquilino profirió una escalofriante sugerencia: “Es difícil eliminarlo de esta manera, acuchíllalo”. A lo que su compañero respondió con pragmatismo sombrío: “No, porque todo quedará impregnado de sangre”.
Intervención Policial y Detención Inmediata
Mientras los perpetradores deliberaban sobre el método más eficaz para consumar el asesinato, un contingente de agentes de la Policía Nacional irrumpió en la residencia. La oportuna intervención fue producto de la alerta emitida por varios vecinos, quienes presenciaron el instante en que los delincuentes ingresaron al domicilio. Los dos individuos fueron aprehendidos de inmediato, frustrando así sus macabros planes.
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