Indígenas de Ecuador han elevado su voz en las elecciones presidenciales, presentando un conjunto de demandas significativas a los dos candidatos finalistas en la contienda. Entre las demandas se incluyen medidas para proteger el medio ambiente, fortalecer los derechos laborales y abordar cuestiones económicas cruciales.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la organización social más influyente del país, hizo público su pliego de peticiones tras una reunión celebrada en Quito. En este documento, los indígenas expresaron su preocupación por la actual situación de inseguridad y crisis en Ecuador, que consideran como el resultado de un “fracaso del modelo económico neoliberal” bajo el liderazgo del presidente Guillermo Lasso.
Uno de los puntos más destacados del pliego es la solicitud de una moratoria minera y la realización de una auditoría integral de todas las concesiones mineras otorgadas. Esto tiene como objetivo verificar posibles daños ambientales y garantizar el cumplimiento de las regulaciones ambientales vigentes.
Además, la Conaie exigió la prohibición de la actividad petrolera en el Parque Nacional Yasuní, una reserva natural en la Amazonía ecuatoriana, y en el Chocó Andino, una reserva al noroeste de Quito. También se manifestaron en contra de las privatizaciones de empresas estatales y pidieron un fortalecimiento del sistema de salud pública y un control de precios para medicamentos y servicios de salud privados.
En el ámbito educativo, los indígenas de Ecuador instaron a la recuperación del sistema de educación pública y la implementación de políticas para combatir la desnutrición infantil. Asimismo, demandaron la regulación de los precios de los productos básicos y estrategias para limitar la concentración de tierras en pocas manos.
La Conaie también abogó por incentivos y apoyo al sector agrícola, así como por políticas que frenen el abuso de los bancos privados. Esto incluyó la reducción de tasas de interés y la imposición de tributos especiales a las ganancias excepcionales de la banca privada.
Otro punto de importancia fue la llamada a una revisión de las fuerzas de seguridad pública y la implementación de políticas destinadas a combatir la creciente inseguridad y el narcotráfico en el país.
En el ámbito laboral, la Conaie rechazó cualquier reforma que afecte los derechos de los trabajadores o precarice sus condiciones laborales. También demandaron la protección de la seguridad social y condiciones adecuadas para las jubilaciones.
Por último, la organización indígena solicitó una auditoría de la deuda pública y el cobro de deudas tributarias a los grandes grupos económicos. Además, se instó a suspender la firma de tratados de libre comercio con otros Estados hasta que las negociaciones sean transparentes y se realicen en beneficio de todos los ecuatorianos.
El anuncio de la Conaie tiene lugar en un momento crucial para Ecuador, cuando el país se prepara para una segunda vuelta electoral el próximo 15 de octubre, en la que los candidatos Luisa González y Daniel Noboa compiten por la presidencia. La voz del movimiento indígena es un recordatorio poderoso de la importancia de abordar cuestiones sociales y ambientales en la política ecuatoriana.
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