El control contra la especulación en venta de mascarillas se refuerza en varias zonas de Portoviejo ante el continuo desabastecimiento de estos productos sanitarios. Este martes 6 de mayo, funcionarios de distintas entidades públicas realizaron un operativo conjunto en la ciudad, en respuesta a denuncias ciudadanas sobre el aumento injustificado en el precio de las mascarillas.
Durante los operativos se inspeccionaron farmacias ubicadas estratégicamente en el casco central, en los alrededores del Hospital de Especialidades y frente al hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). En estas acciones participaron la Intendencia General de Policía de Manabí, el Servicio de Rentas Internas (SRI), la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) y otras entidades gubernamentales, quienes trabajaron de manera coordinada para verificar el cumplimiento de la normativa.
Vendedores informales, principales responsables de la especulación
El intendente Nahin Lara manifestó que la principal preocupación radica en la especulación en venta de mascarillas por parte de vendedores informales. Según explicó, estos comerciantes están duplicando el precio del producto, vendiéndolo por unidades y sin la documentación que justifique su procedencia. Por este motivo, se procedió al decomiso de 35 cajas de mascarillas en la parroquia Calderón, donde no se pudo comprobar el origen ni las condiciones de almacenamiento de los insumos.
Farmacias también enfrentan escasez de mascarillas
La falta de mascarillas en las principales cadenas farmacéuticas de Portoviejo ha generado un terreno fértil para prácticas abusivas en el mercado informal. En algunos locales, informaron que los proveedores podrían reabastecer mascarillas recién la próxima semana. Mientras tanto, algunas farmacias recibieron pequeños lotes este martes, manteniendo un precio entre 2 y 2,50 dólares por caja, dependiendo de la marca.
Arcsa garantiza calidad y legalidad de mascarillas
Por otro lado, Arcsa, en su rol técnico, realizó inspecciones detalladas para garantizar que las mascarillas ofrecidas al público cumplan con los requisitos sanitarios establecidos por la ley. La verificación incluyó el análisis del registro sanitario vigente, así como del almacenamiento adecuado para evitar contaminación o deterioro. También se evaluó que los productos sean eficaces como barrera de protección contra agentes infecciosos.
Ciudadanía debe comprar mascarillas en sitios autorizados
Lara enfatizó que el verdadero foco de la especulación en venta de mascarillas está en las calles, donde los comerciantes informales no solo aumentan arbitrariamente los precios, sino que además distribuyen productos sin trazabilidad, exponiendo a la población a riesgos sanitarios.
Arcsa recordó a los ciudadanos que compren mascarillas solo en establecimientos autorizados. Estos deben ofrecer productos con registro sanitario legal y buenas condiciones de almacenamiento. Solo así se garantiza la protección de la salud pública, evitando la exposición a mascarillas falsificadas o en mal estado.
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