Me voy a permitir expresar algo, que con seguridad muchos no estarán de acuerdo.
El país entero, se dedicó a trabajar, a intentar progresar, a la política, a vivir bien, muchos, la gran mayoría a ser buenas personas, a no hacerle daño a nadie, a vivir bajo principios y valores y consideraron que eso era bueno y se olvidaron de darse cuenta, que somos tan indefensos y tan seguros y tan prepotentes en muchos casos, que nos hemos creído superpoderosos, olvidándonos de lo más importante, volver nuestra mirada al cielo y pedir sabiduría, para reencontrarnos con lo más sagrado que tiene el ser humano, la Fe en el Creador.
Mirémonos en el espejo de El Salvador, un país que está renaciendo de las cenizas, con un presidente, de mano dura y en la otra mano la Biblia.
Es hora de recordar que somos seres humanos, con una fecha de nacimiento y una fecha de expiración, que llega con puntualidad extraordinaria, ni un minuto más, ni un minuto menos, las cosas materiales no caben, para llevarlas al destino final, la tierra, donde todos sin excepción volveremos
El día que nuestros políticos entiendan, que venimos al mundo a servir y no a servirnos a costillas del erario, ese día el país retomará la ruta correcta.
Lo más grave y terrible, es que todavía nuestros pueblos, no logran entender lo que ya está escrito.
Y todo es cuestión de abrir un libro y comenzarlo a leer.
Pienso, sin ser curuchupa, solamente lógica, que, debido a la calidad de Asambleístas de los últimos años, debido a la calidad de presidente, funcionarios públicos, autoridades varias, etc. a todos ellos, deberían obsequiárseles una Biblia, para que comiencen a leer el Nuevo Testamento, como cultura general, estoy segura, convencida, que esos futuros personajes de la Asamblea, Presidente y etcéteras, comenzarían a entender, para que fueron elegidos y cuál es su función.
Esto debería pasar en cada puesto público.
Estamos viviendo una etapa, de conmoción mundial, donde volteamos a ver, hay corrupción, hay atropello, hay manipulación para asesinar a sangre fría, por intereses, políticos, monetarios y de poder, con qué fin, que consiguen, a la larga, cual es la satisfacción, que es en realidad el poder, si este se usa para destruir y no para crear, para construir.
Es hora de comenzar a cambiar el discurso político, cansón y obsoleto, es hora de dejar de engañar, de manipular, de dividir y de destruir. Seamos, convirtámoslo en constructores, no depredadores de nuestra propia raza.
Miremos, con detenimiento a los animales y observemos, como protegen a sus manadas y a sus crías, es realmente fascinante, tomémoslo, un minuto para observar a un ave, como construye su nido, con trabajo, con esfuerzo, no roba, no hace daño, no asesina, tendrán acaso los animales, más amor en sus corazones y más inteligencia en sus diminutos cerebros.
Es hora de mirar, ese bello horizonte que nos ofrece, la creación.
Es hora de generar y crear el bien en cada paso que damos.
Es cierto que todos necesitamos dinero y que el dinero es necesario, pero no indispensable.
El dinero comprara la mansión, pero no la felicidad.
Comprará placeres, pero no el amor.
Pagará la mejor clínica y medicinas, pero jamás comprará la salud.
Alguien me decía, no intentes agradar a tus semejantes, mostrándole tus riquezas, opulencia, señorío y poder, ellos te olvidaran, tan pronto mueras, de tal suerte que acércate más a Jesús, el estará a tu lado siempre, eres su hijo amado, sin importar que hallas hecho en tu vida, un padre, siempre será un padre recibidor de su hijo, en cualquier momento y circunstancia, más aún si hay arrepentimiento y rectificación.
Es ahora, es HOY, que debemos retomar el camino del bien, es la única forma, en que nuestro amado y hermoso país, saldrá del caos y la destrucción, en la que se encuentra
Intentemos no engañarnos nosotros mismos, la vida es un soplo, hoy estamos mañana no sabemos.
Nos acostamos todas las noches, con la muerte en nuestras cabeceras y cada nuevo día, es un nuevo amanecer y un porque agradecer, entonces no hay que seguir perdiendo el tiempo y todos unidos debemos luchar con pasión, para no permitir que el maligne caoticen el Ecuador, como lo hemos visto, en los últimos días.
Los crímenes cometidos dentro de las cárceles, reos asesinando a sus compañeros de prisión con saña, con total descontrol, forajidos tirando bombas a buses llenos de personas, asesinato de un joven prometedor, por pensar y actuar buscando el bien, de quienes, lo eligieron. son cosas sin sentido, por ambición y poder, que no llevarán a la tumba, lo que si llevarán a la tumba y es posible que necesiten un cajón aparte, es la conciencia y a lo mejor el remordimiento, por los errores cometidos
La pregunta que me hago es, podrá el asesino intelectual, el que pagó, para que se cometiera este atroz crimen, poner su cabeza en la almohada y dormir en paz, realmente lo dudo.
Que van a ganar, cuál será el resultado final, si generalmente, el que a cuchillo mata a cuchillo muere. está escrito, no lo digo yo.
No tiene sentido el caos y la violencia dirigida, por cuatro desalmados, ignorantes, sin rumbo, sin horizonte, sin sentir el dolor, que dejan y que los seguirán toda su vida como lobos feroces, hasta exterminarlos.
Es hora de poner los pies en la tierra, es hora de doblar las rodillas y pedirle a Dios sabiduría, por un futuro de paz que todos merecemos.
El Corazón de Jesús, seguirá amparando al Ecuador y de seguro vendrán días de paz, que todos merecemos.
Fuente: La nación
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