La noche del 24 de abril de 2025, el Ministerio del Interior confirmó el rescate exitoso de la esposa y el hijo de Jackson Rodríguez, lateral del Club Sport Emelec. Un grupo de delincuentes secuestró a Andrexy Karelis O. A. y a su hijo de cinco años la madrugada del día anterior, en su vivienda ubicada en Mucho Lote 2, al norte de Guayaquil.
Pese a la complejidad del caso, las autoridades lograron liberarlos sin efectuar ningún pago. La esposa y el hijo de Jackson Rodríguez fueron encontrados en buen estado de salud en una zona de alta peligrosidad.
La madrugada del secuestro: violencia y precisión
El secuestro se ejecutó con extrema violencia. Hombres armados, identificados como presuntos miembros de la organización criminal Los Tiguerones, irrumpieron en la vivienda del futbolista. Utilizando un mazo, derribaron la puerta principal. Aunque Jackson Rodríguez logró esconderse, los delincuentes capturaron a su esposa e hijo.
De forma llamativa, los delincuentes no sustrajeron objetos de valor, lo cual reforzó la hipótesis de que planearon el crimen y lo dirigieron específicamente contra la esposa y el hijo de Jackson Rodríguez.
Inteligencia y acción oportuna: así fue el rescate
La Unidad Antisecuestros (UNASE) localizó a la esposa y al hijo de Jackson Rodríguez 24 horas después, gracias a labores de inteligencia, en el sector Horizontes del Fortín. Los captores, al notar la presencia policial, huyeron entre el monte. No hubo detenidos. Sin embargo, ya existen indicios sólidos para identificar a los responsables.
El comandante Pablo Dávila indicó que los delincuentes exigieron inicialmente USD 500.000 por el rescate, aunque posteriormente la cifra descendió a USD 250.000. No obstante, ninguna suma fue entregada.
Zona de riesgo y patrón delictivo recurrente
El secuestro de la esposa y el hijo de Jackson Rodríguez se suma a una preocupante serie de raptos selectivos ocurridos en Mucho Lote 2. A pesar de que las urbanizaciones cerradas conforman esta zona, las organizaciones criminales la han convertido en un blanco frecuente. En enero de este año, los delincuentes secuestraron a otro residente utilizando un modus operandi casi idéntico.
Los vecinos reportan la presencia habitual de hombres en moto sin casco y una creciente percepción de inseguridad. Las bandas criminales operan con impunidad, trasladando a sus víctimas a casas de seguridad para negociar rescates.
Una problemática que se intensifica
En lo que va del año, al menos 16 víctimas han sido liberadas en el distrito Pascuales. La Policía investiga la implicación de grupos como Los Tiguerones, Los Igualitos, Los Fénix y Los Lobos. Estos secuestros no solo afectan a figuras públicas: revelan una estructura delictiva compleja y una realidad alarmante para cientos de familias.
El caso de la esposa y el hijo de Jackson Rodríguez evidencia cómo la violencia organizada sigue avanzando en zonas urbanas. Y aunque el rescate fue exitoso, la ausencia de detenidos deja en claro que la lucha contra estas redes aún está lejos de concluir.
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