El mundo católico se encuentra en un momento histórico clave con el inicio del cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco, quien falleció el lunes de Pascua a los 88 años a causa de un derrame cerebral e insuficiencia cardíaca. El evento marca el comienzo de un proceso que involucrará a más de 130 cardenales elegibles. Quienes se reunirán el 7 de mayo de 2025 para elegir al nuevo líder de la Iglesia Católica.

La muerte del Papa Francisco y el inicio de los preparativos
La muerte del Papa Francisco dejó un vacío en la Iglesia Católica, y como es tradición, la elección de su sucesor se llevará a cabo en un cónclave. El fallecimiento del Papa ocurrió el lunes de Pascua, y su funeral se celebró con una misa en la escalinata de la Basílica de San Pedro. Atrayendo a dignatarios, miembros de la realeza y a miles de dolientes. El papa fue enterrado en una sencilla tumba en la Basílica de Santa María la Mayor, tal como lo solicitó antes de su muerte.
Tras el funeral, los cardenales comenzaron a reunirse para realizar las primeras congregaciones generales. Donde se tratan asuntos eclesiásticos y se ultiman los preparativos para el cónclave. Este evento será clave para definir el futuro de la Iglesia Católica y sus desafíos globales en el siglo XXI.
Las congregaciones generales y la preparación para el cónclave
Las congregaciones generales son reuniones diarias que se celebran después de la muerte de un papa y antes del inicio del cónclave. Durante estos encuentros, los cardenales discuten temas sobre la Iglesia y sus desafíos, como la administración de la Santa Sede y las reformas necesarias. En estas congregaciones, se están tomando decisiones claves sobre la logística y los detalles para la elección del próximo Papa.
Una de las figuras clave en la organización del cónclave es el cardenal Kevin Farrell. Quien ocupa el cargo de camerlengo y está encargado de administrar los bienes temporales de la Santa Sede. Junto a él, otros cardenales como Reinhard Marx, Luis Antonio Tagle y Dominique Mamberti también están involucrados en la organización y los preparativos.
Los cardenales electores: un cónclave diverso
El cónclave para elegir al nuevo Papa será uno de los más diversos en la historia de la Iglesia Católica. De los 135 cardenales elegibles, 108 fueron nombrados por el Papa Francisco. Esto significa que aproximadamente el 80% de los votos en el cónclave serán emitidos por cardenales designados por él, lo que podría influir en la elección de un sucesor con visión similar a la de Francisco.
Los cardenales menores de 80 años son los que tienen derecho a votar en el cónclave. Aunque la mayoría de los cardenales han llegado ya a Roma, aún no se sabe cuántos estarán presentes en la votación, ya que algunos. Como el cardenal Antonio Cañizares Llovera, han anunciado que no podrán asistir por razones de salud.
El proceso de votación en la Capilla Sixtina

El cónclave se llevará a cabo en la Capilla Sixtina, donde los cardenales se encerrarán para realizar una votación secreta. Para que un cardenal sea elegido como el nuevo Papa, debe recibir una mayoría de dos tercios de los votos. Esta elección se realizará bajo un juramento de secreto, y se espera que la votación sea un proceso muy deliberado. Dada la importancia de elegir al líder de más de 1.400 millones de católicos en todo el mundo.
Las expectativas para el nuevo Papa
El cónclave no solo tiene la tarea de elegir un nuevo Papa, sino también de abordar los importantes retos que enfrenta la Iglesia Católica, desde su relación con la sociedad moderna hasta su papel en el panorama global. Con un Colegio de Cardenales diverso y más de un 80% de los cardenales electores nombrados por el Papa Francisco. La elección de su sucesor será un momento trascendental para la Iglesia.
La elección del nuevo Papa es un proceso de gran trascendencia para la Iglesia Católica, ya que el futuro del catolicismo dependerá de las decisiones que tome el nuevo líder. Este será un cónclave que atraerá la atención no solo de los católicos. Sino también del mundo entero, observando con esperanza el rumbo que tomará la Iglesia.
Fuente: CNN
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