Un Estado sobredimensionado y sus efectos
La economía ecuatoriana atraviesa un ciclo de crisis que se repite cada dos o tres años. Este escenario genera paros violentos y desconfianza social. Según el economista Pedro Romero, el problema central radica en un Estado sobredimensionado que promete más de lo que realmente puede sostener.
El modelo actual bloquea el progreso económico. Las regulaciones excesivas y la falta de oportunidades formales alimentan la frustración ciudadana. Esa situación crea terreno fértil para que oportunistas transformen el malestar en caos. Por ello, la economía ecuatoriana necesita un replanteamiento estructural que devuelva confianza a los ciudadanos e inversionistas.

Confianza e inversión como pilares
La economía ecuatoriana no podrá atraer inversión sin confianza institucional. Rodrigo López, académico de la USFQ, advierte que la previsibilidad fiscal es indispensable. En Ecuador, lo contrario ocurre: reformas tributarias constantes generan incertidumbre y frenan los proyectos productivos.
López sostiene que el camino exige disciplina fiscal y calidad del gasto público. Solo así se podrá fortalecer salud, educación y seguridad sin comprometer la sostenibilidad. Esta visión recalca que la confianza e inversión dependen de instituciones sólidas y de un manejo financiero responsable.
El subsidio al diésel como punto de inflexión
La decisión del presidente Daniel Noboa de eliminar el subsidio al diésel refleja un giro político y económico. Para Romero, esta medida evita un recorte masivo del sector público. Sin embargo, plantea el debate de fondo: qué Estado puede sostener la economía ecuatoriana sin convertirse en una carga insostenible.
Aceptar ajustes fiscales es inevitable. O se financia un Estado más pequeño, o se asume el costo de mantener subsidios. No se pueden sostener ambas alternativas de manera simultánea.
Educación económica para superar el ciclo
López y Santiago García destacan que la pedagogía económica es clave para romper el ciclo de paros. La sociedad debe comprender el costo de oportunidad de los subsidios. Solo con educación se logrará respaldo social a reformas fiscales y políticas públicas sostenibles.
La economía ecuatoriana necesita un pacto nacional mínimo en torno a fiscalidad, productividad y sostenibilidad. Sin diálogo, los conflictos continuarán repitiéndose. Con instituciones fuertes, será posible atraer inversión y recuperar confianza.
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Fuente:
lahora