El escenario económico ecuatoriano enfrenta un panorama crítico. La crisis fiscal en Ecuador 2026 se intensifica con la reducción del financiamiento proveniente de los organismos multilaterales, que disminuirá un 43 %. El Gobierno de Daniel Noboa apuesta por la eliminación del subsidio al diésel para compensar los menores ingresos derivados del bloque ITT.
Un déficit persistente y un margen de acción limitado
El país no tiene espacio fiscal para retroceder. Con un déficit superior a los $5.600 millones en 2025, el Estado deberá mantener una disciplina estricta para cumplir los compromisos del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En 2026, ante la crisis fiscal que persiste en Ecuador, el panorama será más complejo. Los préstamos externos caerán significativamente. Mientras tanto, la economía nacional lidia con la presión social por el alza del combustible.
El programa de crédito del FMI, valorado en $5.000 millones, fue ampliado en 2025 tras la reelección de Noboa. Hasta el momento, Ecuador ha recibido $2.100 millones y espera $1.200 millones adicionales entre octubre y diciembre. Sin embargo, el país debe aprobar dos revisiones técnicas para acceder a esos recursos.
Menos financiamiento y más ajustes fiscales
De acuerdo con el economista Jaime Carrera, en 2025 el Presupuesto General del Estado incluyó más de $5.000 millones en créditos externos. Sin embargo, en 2026 el monto caería a $2.850 millones. Esta disminución refleja el impacto de la crisis fiscal en Ecuador 2026. Esto reduce la liquidez y complica el cumplimiento de obligaciones públicas.
Ante este panorama, el Gobierno eliminó el subsidio al diésel. Según Carlos Moreno, economista, esta decisión es necesaria para mantener el acceso a financiamiento internacional. Además, evitar un incremento en los atrasos del sector público. “No hay espacio fiscal para retroceder”, aseguró, recordando que revertir la medida pondría en riesgo los desembolsos del FMI y la posible emisión de bonos de deuda.
La eliminación del subsidio y el cierre del ITT
La eliminación del subsidio al diésel busca equilibrar los menores ingresos generados por la suspensión de la explotación petrolera en el ITT. Esto significó $256 millones menos entre enero y agosto de 2025.
Carrera explicó que, incluso con un ingreso neto de $870 millones por la eliminación del subsidio, el déficit fiscal podría mantenerse cerca de los $5.000 millones en 2026.
El experto insistió en que la crisis fiscal en Ecuador 2026 se debe a una estructura de gasto público que no ha cambiado en los últimos gobiernos. Además, el Estado enfrentará menores ingresos. Esto se debe a remisiones tributarias y anticipos empresariales.
Desafíos estructurales y falta de consenso político
Las negociaciones con el movimiento indígena se desarrollan en medio de bloqueos y protestas. Sin embargo, el Gobierno sostiene que no puede revertir las decisiones fiscales sin comprometer la estabilidad económica. Esta crisis fiscal en 2026 no mejora con decisiones precipitadas.
Moreno señaló que las demandas sociales son contradictorias. Se exige menos petróleo y minería, pero más inversión en salud y educación, sin un plan de ingresos sostenibles.
Frente a la falta de espacio fiscal y los recortes en el financiamiento externo, Carrera plantea la necesidad de reducir el gasto corriente. También sugiere reformar el sistema de pensiones del IESS y renegociar los pagos de la deuda pública. Solo así, dijo, podrá garantizarse la sostenibilidad económica del país.
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