El multimillonario Bill Gates anunció que donará casi toda su fortuna restante a la Fundación Bill y Melinda Gates, con el objetivo de gastar más de USD 200.000 millones hasta 2045, año en que la fundación cerrará sus puertas. En medio de este anuncio, Gates también arremetió contra Elon Musk, a quien responsabiliza por el recorte de fondos que han afectado a programas vitales para los países más pobres del mundo.
Una nueva meta: donar prácticamente toda su riqueza en 20 años
El anuncio fue realizado el 8 de mayo de 2025 a través de una carta abierta titulada “Mi nuevo plazo: 20 años para regalar prácticamente toda mi riqueza”, en la que Gates explicó su decisión de acelerar el trabajo de su fundación, que ha tenido un papel crucial en la lucha contra la pobreza y enfermedades como la malaria y el VIH.
“Muchas cosas pueden pasar en 20 años. Quiero asegurarme de que el mundo avance durante ese tiempo”, dijo el cofundador de Microsoft, de 69 años, en su misiva. Agregó que su propósito es que al final de su vida, no se diga de él que “murió rico”.
Dejar un legado de impacto antes del cierre de la fundación
La Fundación Bill y Melinda Gates fue creada en el año 2000 con el objetivo de operar incluso después de la muerte de sus fundadores. Sin embargo, según Gates, la junta directiva ha concluido que es posible cumplir con sus objetivos antes del año 2045. A lo largo de sus primeros 25 años, la fundación ha donado más de USD 100.000 millones, y ahora se propone duplicar esa cifra en los próximos 20 años.
“La cantidad exacta dependerá de los mercados y la inflación, pero preveo que la fundación invertirá más de USD 200.000 millones de aquí a 2045”, detalló Gates.
Críticas directas a Elon Musk: «Se ha involucrado en la muerte de niños pobres»
En una entrevista con The New York Times, Gates también lanzó duras críticas contra Elon Musk, quien habría liderado una comisión gubernamental bajo la administración de Donald Trump y, según Gates, fue responsable del desmantelamiento de USAID (la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional).
«Él (Musk) fue el que recortó el presupuesto de USAID. La puso en la trituradora, y todo porque no fue a una fiesta aquel fin de semana», afirmó Gates con ironía. Más allá del comentario anecdótico, subrayó que esos recortes han resultado en la paralización de programas esenciales de salud global, afectando directamente la lucha contra el VIH, la malaria y la polio.
“El hombre más rico del mundo va a estar implicado en la muerte de algunos de los niños más pobres del mundo”, sentenció Gates, acusando a Musk de haber ignorado su potencial como filántropo.
Un llamado a la nueva generación de ricos
Gates aprovechó también para reflexionar sobre la evolución de la filantropía entre los millonarios del mundo. Afirmó que, a diferencia de hace veinte años, hoy las grandes fortunas ya no están tan comprometidas con el trabajo humanitario.
«No es que nos estemos quedando sin gente rica. Va a haber cada vez más», advirtió. «Pienso que los ricos de hoy deberían hacer más filantropía. Los ricos de aquí a veinte años deberían hacer más filantropía», añadió, dejando claro que su decisión busca ser un ejemplo para otros.
Un legado filantrópico y un mensaje directo
El anuncio de Bill Gates no solo marca un hito en la historia de la filantropía moderna, sino que también plantea un debate crucial sobre la responsabilidad social de las grandes fortunas en un mundo marcado por crecientes desigualdades. A través de su crítica a Elon Musk y su llamado a los multimillonarios, Gates busca influir en el rumbo ético del poder económico en el siglo XXI.
Fuente: Primicias.ec
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