La mañana del sábado 7 de septiembre, varias ciudades de Ecuador, entre ellas Quito, Guayaquil, Manta y Ambato, experimentaron un apagón masivo que inició alrededor de las 08:20. Según informó el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), la causa del corte fue una falla en la subestación Molino, una instalación clave conectada al sistema de generación de Paute, una de las principales hidroeléctricas del país.
El apagón afectó a miles de ciudadanos y paralizó varias actividades comerciales y domésticas. Durante las primeras horas, se desconocía la magnitud total de la falla, lo que generó incertidumbre entre los habitantes de las zonas afectadas.
Restablecimiento del servicio
El Cenace informó que el suministro eléctrico se fue recuperando paulatinamente en las distintas ciudades afectadas. Finalmente, a las 12:53, más de cuatro horas después del inicio del apagón, se logró restablecer el 100% de la demanda energética en el país.
“Gracias al esfuerzo coordinado, hemos logrado restablecer el servicio eléctrico en todo el territorio afectado”, comunicó la entidad en redes sociales, aunque sin dejar de lado la preocupación por la situación actual del sistema eléctrico.
Apagón masivo: Un sistema energético bajo presión
Ecuador atraviesa una situación crítica en su sistema energético debido a la sequía prolongada que afecta los ríos que alimentan las principales hidroeléctricas del país. Uno de los casos más preocupantes es el del río que abastece la central Coca Codo Sinclair, cuya producción eléctrica ha disminuido a la mitad.
José Alvear, experto en energía, advirtió que los apagones podrían volverse más comunes en el futuro inmediato debido al déficit energético que enfrenta Ecuador. “Estamos en una situación de estiaje severo, y si no se toman medidas drásticas, podríamos ver más cortes de electricidad”, sostuvo el especialista.
Medidas adoptadas por el gobierno
Ante este escenario, la Cartera de Energía ha tratado de implementar varias soluciones. Una de ellas fue la compra de una barcaza generadora de energía, que se esperaba ayudara a mitigar el déficit. Sin embargo, esta medida no tuvo el éxito esperado, y aunque hubiera sido eficaz, su capacidad no habría sido suficiente para cubrir las necesidades energéticas del país.
Por otro lado, el gobierno lanzó una licitación para un sistema de interconexión eléctrica con Perú, con el fin de diversificar las fuentes de energía y asegurar una mayor estabilidad en el suministro. No obstante, esta medida aún está en proceso y no representa una solución inmediata a la crisis.
Apagón masivo: Perspectivas a futuro
El apagón del 7 de septiembre es un recordatorio de los desafíos que enfrenta Ecuador en el manejo de su sistema eléctrico. Con la reducción de la producción en centrales hidroeléctricas clave y una creciente demanda de energía, el país se encuentra en una encrucijada que requerirá inversiones importantes y soluciones innovadoras en los próximos meses para evitar que situaciones como esta se repitan.
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