A pesar del tiempo transcurrido desde el surgimiento del COVID-19, la amenaza persiste en la forma de numerosas defunciones y hospitalizaciones a nivel mundial. Datos recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan un constante medio millón de nuevos casos de infección por COVID-19 a nivel global. Este panorama impulsa la necesidad urgente de administrar dosis de refuerzo a la población, especialmente con la aparición de nuevas variantes del virus y la disminución de la inmunidad.
Vacunas: La defensa fundamental
El Grupo Asesor Técnico de la OMS sobre la Composición de la Vacuna COVID-19 insta a mantener la composición actual del antígeno de la vacuna, lo que incluye la aplicación de una dosis de refuerzo. Estas medidas son cruciales dado que las variantes más recientes, como Ómicron, han desplazado a las anteriores y representan el principal foco de infección. Álvaro Ramírez, gerente médico de la Unidad de Vacunas de Medicamenta, destaca la importancia de adaptar las vacunas para combatir las variantes más contagiosas.
Ventajas y actualización continua
Las vacunas no solo son la forma más segura de generar protección, sino que también ofrecen defensa adicional a quienes han padecido la enfermedad, evitando así hospitalizaciones en casos de reinfección. Además, la actualización constante de las vacunas es esencial para controlar el patrón de oleadas, especialmente ante la evolución del virus.
Plataforma ARNm: Un avance significativo
Cuatro años después de que la OMS declarara la emergencia de salud pública por el COVID-19, la plataforma ARNm ha sido fundamental en el desarrollo de vacunas eficaces contra las variantes emergentes. Moderna, por ejemplo, ha logrado avances significativos en la generación de una vacuna monovalente actualizada contra la variante XBB.1.5, con resultados prometedores en términos de respuesta inmunitaria.
En resumen, aunque han pasado cuatro años desde el surgimiento del COVID-19, la amenaza persiste debido a la continua evolución del virus. Sin embargo, el desarrollo y la administración de vacunas actualizadas son fundamentales para contener la enfermedad y proteger a la población contra las nuevas variantes.
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