El pasado sábado 29 de julio, el Consejo Nacional Electoral (CNE) llevó a cabo con éxito el primer Simulacro Nacional, preparándose para garantizar el desarrollo sin contratiempos de las elecciones presidenciales y legislativas anticipadas en 2023, así como las consultas populares Yasuní y Chocó Andino.
Este relevante ensayo electoral tuvo como objetivo principal poner a prueba los procedimientos técnicos y operativos necesarios para asegurar la transparencia y confiabilidad del proceso electoral. La constitución de la Junta Receptora del Voto fue uno de los aspectos clave durante el simulacro, y la participación de todos sus miembros garantizó un Acta de Instalación firmada y exhibida en un lugar visible para conocimiento público.
El sistema informático y de escrutinios también fue sometido a una minuciosa evaluación en todas sus fases cruciales, desde la instalación hasta el embalaje. Esta evaluación exhaustiva permitió identificar y corregir cualquier posible falla o inconveniente que pudiera surgir durante las elecciones reales, asegurando así un proceso fluido y confiable.
El desempeño de los módulos del sistema informático de escrutinios y resultados (SIER) también fue verificado de manera detallada. El uso del 100 % de las actas del binomio presidencial permitió evaluar la infraestructura tecnológica y la seguridad informática, incluyendo el sistema de votación telemática y la publicación de resultados. Todo esto garantiza la integridad de los datos y la protección de la información sensible durante el día de las elecciones.
El simulacro se llevó a cabo a nivel nacional con la participación de 6.316 personas, entre ellas 896 miembros de la Policía Nacional, 666 de las Fuerzas Armadas, 313 delegados de organizaciones políticas y 4.441 funcionarios electorales. Además, se contó con 56 observadores electorales nacionales, dos internacionales y cinco miembros de asistencia técnica y cooperante, asegurando la supervisión y el apoyo necesario para un proceso transparente y confiable.
El CNE demuestra su compromiso con la preparación y mejora constante de los procesos electorales en Ecuador, garantizando la participación ciudadana y la protección de la democracia. Con este primer simulacro nacional, se sientan las bases para unas elecciones anticipadas exitosas en 2023.
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